Fahrenheit 9/11


Muy pocas veces un documental llega a los cines del circuito comercial. No porque sean malos, porque no tengan un buen guión o porque el presupuesto fuera mínimo. Simplemente porque la gente no paga una entrada en el cine para ver un documental. Es así de triste y así de sencillo.

Esta regla funciona casi siempre. El único que parece romperla es Michael Moore. Su anterior documental (o película), Bowling for Columbine, se extendió como la pólvora por todo el mundo llegando a los circuitos comerciales. Se trataba de una excelente y sesgada visión de la sociedad americana y su afinidad por las armas de fuego.

Ahora, un par de años más tarde, vuelve con Fahrenheit 9/11, su particular testimonio sobre la elección del hombre al que se puede encontrar en Google buscando Miserable Failure y sobre la guerra contra el terrorismo (Iraquí, mayormente).

La película se divide en dos partes claramente diferenciadas. En la primera se analiza la ¿victoria? Del presidente de los estados unidos en las elecciones del 2000. también se analizan sus vínculos con los saudíes y con la familia Bin Laden. Resulta estremecedor. Las relaciones entre el clan Bush y esta gente ponen los pelos de punta. Por no mencionar que los saudíes podrían tumbar la economía americana si sacaran de golpe todo su dinero del país. Esta primera hora de película es absolutamente brillante. Michael Moore nos zarandea y nos lleva a un terreno que maneja a la perfección. Cuando acaba con Bush, no es más que un patético retardado que sólo piensa en hacer dinero y a quien no le importa una mierda el pueblo americano. La escena de Bush en el colegio en Miami leyendo cuentos cuando sabía que se habían producido los dos choques de aviones contra el WTC es antológica, realzada aún más con la voz en off de Michael Moore.

En la segunda hora se centra en la guerra contra Irak, la famosa ?Coalición Internacional?? y los turbios intereses de esta guerra. Esta parte nos pilla más de lejos a los europeos y no es tan absorbente como la primera. Obviamente se trata de exponer un punto de vista diferente al de las televisiones oficialistas a los votantes norteamericanos y eso a nosotros nos la trae floja. Ofrece los típicos recursos de los programas basura con testimonios dramáticos de madres que han perdido hijos, militares que volvieron hechos una mierda para encontrar que el tío Sam pasa de ellos y los abusos de los soldados americanos en Irak para dar la libertad a esa gente.

De esta segunda parte, lo más terrorífico es ver como mintieron los políticos antes y después de la guerra y escuchar la respuesta de Donald Rumsfeld en una entrevista cuando le preguntan que donde están las armas de destrucción masiva y químicas iraquíes, las que provocaron la guerra. Su respuesta fue: ?Deben estar en los alrededores de Bagdad o Tikrit o en el Norte, Sur, Este u Oeste??. Espero que cuando dice Oeste no se refiera a los Países Bajos, porque con semejante respuesta esas armas pueden estar hasta en los Estados Unidos.

Así que creo que merece la pena verla, es altamente educativa y ofrece un punto de vista muy diferente del que se puede ver viendo las noticias en la tele (sobre todo en la americana). Si queréis más información en español, haced clic aquí
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