Battleship


Anoche había un preestreno y como la semana se me presenta bien jodida y es más que probable que no pueda ir con frecuencia al cine, opté por ir a la sesión de los Orcos, la última, esa en la que la gente se encochina con cubos de roscas gigantescos, todos gritan cuando hablan y las tías parece que tienen la urticaria en la pipa del coño y se restriegan contra sus machos como para marcarlos con su olor a meado. Llegué al cine con tiempo para recoger mi entrada reservada y visto que el espectáculo era dantesco, opté por darme un paseo por el viejo y señorial Oudegracht, el canal que recorre el corazón de Utrecht y que es el más hermoso de Holanda. Entré en la sala y como hago siempre que voy a una de estas sesiones, me senté casi en la primera fila, ya que si hay algo que tienen todos los Orcos en común es que les molesta la luz y se sientan al final de la sala. La película se titula Battleship y en España se ha estrenado esta semana.

Un puñado de julays han de salvar el mundo y el universo desconocido de cuatro pateras de okupas que llegan de Raticulín o hasta más allá, quizás Vecindario ??

Esta es una de esas películas agradecidas en cuanto a historia. Se trata de matar extraterrestres para evitar que nos exterminen como especie. En este caso, nuestros héroes van en un barco que queda atrapado en el interior de la pantalla protectora de los bichos malos y harán lo imposible por salvar a la humanidad.

Aquí la testosterona se usó por toneladas. Tenemos una peli de guerra naval, con extraterrestres, con una chocha que chupa historia secundaria para enseñarnos lo grandes y redondas que tiene las domingas, con un tío guaperas que llega a capitán sin saberse muy bien ni como y con una trama basada en esa vieja regla que dice que las explosiones, cuanto más, mejor. Al parecer se basaron en un juego naval, pero bueno, que sepáis que cualquier parecido con la realidad es pura fantasía. La historia es tan simple que el guión no debía tener más de tres páginas y con doble ancho de márgenes pero tampoco les hace falta más ya que aquí hay que enlazar batalla tras batalla y los diálogos, cuando los hay, son unas frases tan grandilocuentes que resultan simplonas y hacen que nos riámos en la sala. Los efectos especiales están muy bien logrado, se agradece que no nos obliguen a ponernos gafas y quien me iba a decir a mí que iba a ir a ver una peli de Rihanna haciendo de marine y con dos cojones bien puestos. Flipé también porque sale Alexander Skarsgård del cual estoy convencido que todos lo adoramos así que si alguien no lo hace, que no me diga nada que paso de llevarme disgustos. El protagonista es Taylor Kitsch al cual no hace ni dos lunas vi en John Carter y me cayó bien. Este es cine de palomitas, intrascendente, para divertirte y flipar con los efectos, con las muertes y con las volatadas superlativas que se suceden sin tregua.

No es apta para intelectuales y portadores de gafapasta pero si eres un miembro del Clan de los Orcos, no ir a ver esta película supone la expulsión inmediata del Clan, así que tú verás lo que haces.


2 respuestas a “Battleship”

  1. Huy, habiendo visto el trailer esta no la vería ni cobrando con el poco cariño que le tengo a los efectos especiales.