No solo vimos al Papa en nuestra visita a Roma. Coincidimos con el Emperador del mundo, ese lucero del alba, alegría del imperio, esperanza blanca, salvador de la fe, amado esposo, sufrido padre y ex-alcohólico conocido que acaba su segundo mandato siendo el presidente más infame de la historia de los Estados Unidos de Norteamérica. Por culpa de la visita de George W. Bush la policía tomó la ciudad y aquello parecía más bien un escenario de película. Mirando el lado positivo, la miasma rumana que habitualmente robaba a los turistas puso tierra de por medio y las calles eran nuestras. Uno de los días, las organizaciones de izquierda, los anarquistas, los antiglobalización y alguna otra gentuza tenían prevista una manifestación que por supuesto se salió de su cauce y se convirtió en una batalla. A nosotros nos pilló justo al lado del núcleo en el que se repartían hostias. Regimientos completos de antidisturbios salían al encuentro de la chusma y les daban candela hasta que los dejaban bien calentitos. Los vimos traer de vuelta a macarras cargados de canicas de hierro, tías con piercings por toda la cara y que te escupían a la mínima y otros animales que nos hacían dudar sobre las teorías de Darwin ya que más que del mono parecían haber evolucionado del burro y del cerdo. Tengo algunas fotos increíbles de la batalla pero me quedo con esta legión de los tiempos modernos que se apresta a entrar en batalla.
5 respuestas a “Cargando contra la chusma”
La foto es espectacular. Estabais en el centro del fregao.
Esta foto me impresiona mucho, la verdad, parece sacada de una peli, pero no ES ROMA ( donde también hay Internet, por cierto) Besos.
Tomada en el Campo di Fiori, esa entrañable plaza situada en una zona llenísima de buenos restaurantes.
¿Y los galos? Faltan los galos… xD
Galos no vimos pero los anarquistas corrían que no veas y eso pese a los piercings y esos pantalones a la altura de las rodillas y cuatro tallas más grandes que posiblemente les causan más de un quebradero de cabeza.