Churros


En Gran Canaria, a las porras se les llama churros y cuando entras en una churrería, es muy probable que te lleves un disgusto cuando lo que te sirven es una porra. Como en el resto de España, son sitios muy populares para ir al amanecer, después de una noche de marcha, pero también para merendar y en estos últimos años han aparecido un montón de churrerías. Esta es una de las cosillas que echaba de menos al vivir fuera de España y un día decidí ponerme manos a la obra, investigar y tratar de recrearlos. Mi primera camada surgió de mi manga pastelera y fue un completo desastre. La segunda no tuvo mucha más suerte y ahí fue cuando decidí que necesitaba una churrera. Me puse en contacto con mi amiga Waiting y ella se encargó de comprarme una y mandármela por correo y al recibirla se me abrió un nuevo universo para los desayunos del fin de semana.

La receta de los churros no tiene ciencia alguna y cada uno la altera como quiere. En mi caso, he substituido el agua por leche y la harina normal por harina integral ya que me gusta más el sabor de esta última. Sin más dilación, aquí está la legendaria receta de los churros:

Los ingredientes: 100 gramos de harina (integral o de fuerza) por cada 100 ml. de agua (o de leche o una mezcla de ambas), aceite, azúcar y un poco de sal si se quiere. Con esta cantidad salen churros más que suficientes para una persona y es fácil de multiplicar. Mi churrera tiene capacidad para masa hecha con 250 gr. de harina y 250 ml. de agua.

La implementación: Se pone en un caldero (o en el microondas) el agua (o la leche) a hervir. Ponemos en un bol la harina y cuando el líquido está hirviendo, los mezclamos ayudándonos de un tenedor. En menos de treinta segundos tendremos la masa preparada y si queréis la dejáis reposar un poco mientras calentamos el aceite en una sartén. Hay que poner al menos un dedo de aceite y calentarla a conciencia. Yo prefiero el aceite de girasol ya que el de oliva les da demasiado sabor a los churros pero supongo que otra gente opinará de manera distinta.

Podemos hacer los churros previamente y ponerlos en el aceite o echarlos directamente desde la churrera, aquí cada maestrillo tiene su librillo. Si el aceite está a una buena temperatura, en menos de un minuto tenéis un churro increíble. Al sacarlos los pongo a escurrir el aceite en papel de cocina y después los espolvoreo con azúcar.

Y eso es todo. Listos para comer, simples, rápidos de preparar y absolutamente deliciosos.

Si quieres ver otras recetas que he cocinado puedes ir al índice de Mi pequeño libro de recetas de cocina y allí tienes la lista completa


4 respuestas a “Churros”

  1. ¿Y esto es todo?
    Esto loo ha hecho mi vecina y no le salen en absoluto.
    Luego ha probado otra receta, que se le pone bicarbonato, otra con levadura, y nada.
    En fin, muchas gracias, yo se la voy a pasar haber si hay suerte.
    Salud

  2. O la máquina que usa no los aprieta adecuadamente o la temperatura del aceite no es lo suficientemente caliente. Hoy los he vuelto a hacer, en versión especial. El lunes pongo la foto en el resumen semanal y lo vas a flipar.

  3. Le diré todo eso a la vecina, pero yo he presenciado sus fracasos varias veces, también los he sufrido, y parecía todo correcto, además, para mas inri, han ido pasando por la experiencia con el mismo fracaso, su anciana madre, su hermana, sobrinas, cuñada y su hija, una sola vez la sobrina se acercó a la normalidad pero cuando yo dije que seguían siendo malos, se ha negado a hacerlos mas…jajajaja
    Salud

  4. Yo he ido a un sitio especializado en cosas pasteleras para comprar la churrera. Quizas es eso lo que le falta a tu vecina, comprar una especializada. Le iba a comprar a Sulaco la mas cara, que era una pasada, pero como el es sencillo me pidio que le comprara la que le seguia en precio, que sino le hubiese llegado una nave espacial a casa. Para que luego se queje y diga que yo no pago nada por el :S
    Besitos.