Come Mielda


Mucho se ha hablado en estas tierras sobre las putas sucias y rastreras. Mucha verdad se ha vertido al efecto. Nadie lo ha dejado caer pero se puede sentir en el aire esa vaga sensación que da el saber que estamos ignorando a otro grupo tan peligroso como este. Son la versión masculina, los equivalentes del sexo opuesto de estas abominaciones inhumanas. Se trata de los Come Mielda, término lanzado al estrellato por el presidente cubano en una infame conversación telefónica con un impostor.

Un Come Mielda es un cabrón hijoputa cuya misión es la de amargar al prójimo y hacerle la vida imposible. Los podemos encontrar por todas partes. Tienden a trabajar en solitario aunque tampoco es extraño el verlos actuar en grupo. A veces te topas con ellos en la taquilla del cine, o en un bar, o directamente en esa oficina en la que se parapeta ese al que llamas el jefe. En este último caso se encargará de enmarronarte hasta la coronilla, de obligarte a trabajar hasta tarde preparando informes que no le interesan y que sabe que no usará, buscará el llevarte hasta los límites de tu aguante una y otra vez mientras te grita que no tienes ni puta idea de nada y que te va a poner en la puta calle.

A los Come Mielda les gusta particularmente trabajar en la administración, de cara al público. Así pueden humillarte y burlarse de ti el día que tienes que hacer una gestión. Te ven llegar y te sonríen con ese rictus cainita. Les explicas el problema, les enseñas los documentos que has traído y ellos procurarán que no tengas éxito y que la experiencia sea tan traumática como sea posible. No te ayudarán ni harán nada por tí. Lo primero es anular las esperanzas y después solicitar todo tipo de papeles que no has traído y que te obligarán a volver una y otra vez. Cuando se les acabe esta línea argumental te dirán que toca esperar y dejarán la carpeta con tus papeles olvidada en el montón en el que almacenan sus maldades. Tras unos meses lo descubrirás, quizás un día que vas por allí y ese come Mielda está de vacaciones y otra persona te atiende. La rabia, la ira que te embarga te la tendrás que tragar porque necesitas solucionar el asunto y así su fechoría quedará impune.

Otras veces te los tropiezas en un restaurante. Te traen platos que no has pedido, te ignoran cuando los llamas, te tratan al trancazo y a la hora de pagar esperan que les des una generosa propina, la cual le niegas y al menos en este caso tienes una pequeña satisfacción. Al contrario que sus compinches femeninas los come Mielda no suelen actuar en lugares públicos de forma improvisada. Ellos prefieren su lugar de trabajo como escenario para sus fechorías. Eso los hace mucho más peligrosos. Suelen ser conocidos y tolerados por los demás, que ríen las gracias y no se dan cuenta del cáncer que tienen a su lado.

Tenemos que agruparnos y desarrollar estrategias para actuar contra ellos, neutralizarlos y a ser posibles erradicarlos de la faz de la tierra. En las primeras naves que mandemos a colonizar otros planetas tendremos que llenarlas con los unos y las otras. Hasta que llegue ese momento, acciones sencillas que los jodan y les molesten sin que os puedan culpar de nada.


6 respuestas a “Come Mielda”

  1. NO PUEDE SER… sulaco, el termino come mielda lo tenemos yo y mi jefe todo el dia en la boca 🙂 El es de Costa Rica, asi pues hablamos español entre nosotros siempre, y para cachondearnos de los imbeciles de los holandeses de mi trabajo los llamamos come mieldas delante de sus narices y nos partimos… «Come mielda…. que estas comiendo mielda de la calentitaaaa, frequiiiiita, sabrosiiiiita».

    Hihihi me ha hecho gracias leerlo aqui.

  2. Las empresas seleccionan a comemieldas para tener jefes que aprieten al personal, que les exploten para favorecer los intereses económicos de las empresas. En Argentina hay un dicho que dice que el que sabe, sabe, y el que no es jefe. He leído un comentario de Juan Varela, en Periodistas 21 blogspot.como, publicado en noviembre de 2003, que la mayoría de los jefes de redacción de los periódicos son incompetentes. ¿Qué se puede esperar de una sociedad que elige a mediocres para la jefatura de un diario?. Estoy de acuerdo y apoyo la creación de un club contra los comemieldas, soy el primero en apuntarme. Me ha gustado mucho el comentario por su realismo y candente actualidad.

  3. Hola. yo también quería unirme a la causa para acabar con los comemieldas, a esa pandilla de cerdos de la doble moral ya le va llegando la hora de que empezemos una campaña contra ellos.
    Como tu dices están en todas partes, pueden ser conocidos, compañeros, jefes …, muchos.

  4. Esto es una máxima cumplida el 99% de las veces en el caso de los encargados de supermercados, brutal, suele ocurrir que la gente con poco cerebro en cuanto tienen el poder se vuelven sombríos y retorcidos (como Frodo con el puto anillo).

  5. He visto a un par de comemielda en el aeropuerto de Madrid Barajas. Se ponen detrás de un mostrador de información para putear a la gente.