After the Dark


Después de regresar de mis vacaciones en Asia, la cartelera del cine estaba llena de títulos que esperaba y de algunos de los que no había oído hablar, como el de hoy. No la ponían en demasiados cines, con lo que tuve que calcular muy bien para encajar una sesión doble con esta película y otra, que casualmente es el musical del que he hablado también hoy. Se trata de After the Dark, aunque en los Países Bajos se ha estrenado con el título de The Philosophers y en España parece que jamás de los jamases llegará a las pantallas de los cines.

Un julay profesor se inventa unos cuentos de que te cagas para entretener a los alumnos

En una escuela de Singapur, en la última clase antes de fin de curso el profesor organiza una especie de prueba de lógica en la que un grupo de estudiantes han de sobrevivir a una catástrofe nuclear en un refugio durante un año. En las diferentes versiones del evento que hacen en la escuela, todos parecen aprender algo o quizás no.

Esto es una especie de película de ciencia ficción. Tenemos a un grupo de jóvenes, un profesor que parece un tanto rarito y unos escenarios fastuosos. Lo que no tenemos es un guión decente. La historia hace agua desde el comienzo, ya que no sabemos si están haciendo un ejercicio en un aula o la cosa está sucediendo realmente. Tampoco cuaja demasiado que entre el profesor y una de sus alumnas parezca que hay algo, que o le está poniendo la pierna encima o directamente se la está empetando hasta los pelos de los güevos con ilusión y fantasía. En los diferentes escenarios que vemos, lo mejor son los lugares, ya que tenemos lugares increíbles de Indonesia, bellísimos parajes en los que por supuesto, yo estuve el año pasado, con lo que me sonaban. Eso es en realidad lo único decente, ya que los jóvenes actores fueron elegidos a conciencia con una incapacidad tremenda para actuar, son todos unos teniques inútiles que te ponen los pelos de punta cada vez que la cagan abriendo la boca. El único adulto en la historia es James D’Arcy, que tampoco se luce y me recuerda al patético profesor de filosofía que tuve en el instituto, un puto inútil que no valía para nada. Si la cosa iba mal con las dos primeras tandas de experimento, la tercera es patética tirando a peor. El guionista y el director de repente se creen los poseedores de la verdad más absoluta y pretenden iluminarnos, solo que el tiro les sale por la culata.

Como no se va a estrenar en España, ningún miembro del Clan de los Orcos se ha de preocupar, igual que tampoco afectará a las vidas de los sub-intelectuales de GafaPasta. Repito, lo único bueno son los escenarios en Indonesia, esas imágenes increíbles son las que le dan los puntos.


3 respuestas a “After the Dark”

  1. Y de esa «traducción» pachanguera del título no dices nada?? Porque tiene huevos la cosa….

  2. El título The Philosophers es el que se usó durante toda la producción de la película. Por razones desconocidas, en inglés al final optaron por el otro, pero en Alemania, Holanda, Rusia y Ucrania la han estrenado con el que tenía originalmente. El After the Dark se lo han puesto para gringos y canadienses