Durante la batalla de Corregidor una parte de los túneles la usaron como el cuartel del General Douglas MacArthur y en la actualidad tienen la zona ambientada como el despacho que supuestamente era en aquella época, aunque dudo que sean los muebles originales. Tiene sentido que el chamo no esté al final del túnel ya que a la hora de salir por patas, el que está al fondo no lo cuenta. En otra sección de estos túneles montaron un hospital con una capacidad de mil camas. A lo largo del túnel principal montaron una especie de pequeño tranvía eléctrico y dentro de los túneles había tiendas y almacenes, con lo que era básicamente como una pequeña ciudad.