El chamo que aparece en el altar de este templo es Dinh Bo Linh, el primer emperador vietnamita tras la liberación de China. Viendo la figura nos queda claro que los vietnamitas no tenían acceso al artisteo occidental, mucho más currado. El colega comenzó como rey de su barrio y en cierto momento se creyó honorable como ciertos ladrones presidentes de truscoluña y se auto-proclamó emperador del Emporio vietnamita, el cual duró dos o tres lunas. El colega tenía unas dotes como lameculos épicas y para agarrarse a la silla, mandó al emperador Chino unos regalillos y tal y tal, dándole a entender que era un fiel vasallo suyo y pagando por su vasallaje. Creó un sistema de justicia en el que para el delito de traición se podía elegir entre que te cocinaran en aceite hirviendo o te echaran en la jaula de un tigre, ambos castigos muy comedidos y propios de un sistema en el que el ser humano es muy considerado. Al colega lo mataron pronto y como propina, mataron también a su primogénito.

Pese a todo esto, se le sigue recordando como el hombre que trajo la liberación del yugo chino a Vietnam y su primer rey.