Si no existiera la cerveza Erdinger en el universo, la Franziskaner Hefe-Weissbier sería mi favorita. Es una deliciosa cerveza de trigo que se produce en Munich y que también se sirve en el Oktoberfest. Como siempre tenemos a los chorlitos que hablan y hablan del vino como si fuera lo mejor del universo, merece la pena señalar que esta cerveza fue mencionada por primera vez en el año 1397, o sea, tres años antes de que acabara el siglo XIV (equis-palito-uve) y si lo quieres ver con más perspectiva, Cristotal Colón no llegó a América hasta noventa y cinco años más tarde. La compañía ha pasado por un montón de manos pero eso no quita que esta cerveza sea una de las más populares entre las de trigo y está disponible prácticamente en cualquier rincón del universo, con lo que una visita a tu supermercado favorito debería ser suficiente para poder comprar una botella de medio litro de este elixir delicioso. La Franziskaner Hefe-Weissbier tiene un porcentaje de alcohol de 5,0%, produce unas cantidades significativas de espuma y al tomarla te trae a la memoria retazos de sabor con cilantro y limón entre otros. Esta me la tomé en el Ratskeller München, un restaurante gigantesco que ocupa casi todo el sótano del Neues Rathaus, el fabuloso y espectacular edificio del ayuntamiento de la ciudad.
3 respuestas a “Franziskaner Hefe-Weissbier”
Si es por años, te recuerdo que ya Noé agarró un peo de vino del copón cuando el arca atracó en alguna parte 🙂
Así que un respeto al vino que es mucho mas anciano que la birra 🙂
Salud
Yo he probado alguna Franziskaner y eso de cerveza de trigo como que no me acaba de convencer, creo que prefiero las de cebada.
De todas maneras, debemos rendir el homenaje debido a la cerveza, ya que es la bebida que ha permitido que la civilización se desarrollara.
Cuando el ser humano empezó a vivir en ciudades grandes, los problemas de higiene eran muchos al no haber alcantarillado. Debido a esto el agua de beber era insalubre y producía muchas enfermedades y muertes. Este problema se solucionó bebiendo cerveza. Ellos no sabían porque, pero si sabían que si bebían cerveza en lugar de agua no se ponían enfermos.
Hoy sabemos que como para producir la cerveza había que calentar el agua este calentamiento hacia que se eliminaran todos los gérmenes.
Así que la cerveza es la responsable de que podamos vivir en ciudades, si no es por ella aún viviríamos aislados en pequeñas comunidades.
Muy interesante lo que ha contado Luís.