Hitman


Al parecer la película de la que quiero hablar hoy comenzó como un juego para consolas y ha dado al salto a la gran pantalla dado su éxito. Para mí la primera vez que oí hablar de la historia de Hitman fue al ver el trailer en una tarde de otoño y puesto que tengo un abono y puedo ver tanto cine como quiera al mes por una cantidad fija, la añadí a la lista de películas que quería ver sin saber nada más de ella.

Un julay acarajotado es un profesional de la matanza de cerdos

No hay que calentarse mucho las neuronas con la historia de esta película. Un tipo entrenado para matar y con el efectivo nombre de Agente 47 recibe un encargo para liquidar al presidente ruso y la pifia. Herido en su amor propio, tratará de desenredar el meollo de la cuestión haciendo eso para lo que lo han educado que no es otra cosa que matar y en el camino se encoña con una chocha de esas que no saben ya qué hacer para lograr salir de Rusia y entrar en el primer mundo de la Unión Europea. Hay un fondillo como de religión y movida mística en la forma en la que los agentes son educados y supongo que por eso obligaron a caminar al tipo como si fuera un T1000 de vuelta a nuestro presente para liquidar a alguien. El colega tiene un código de barras en la nuca que cada vez que va al supermercado le da más de un disgusto con los securatas que trabajan allí y que piensan que es uno de los productos que se les escapa. Supuestamente tiene encanto aunque se lo debió dejar en algún puticlub y nunca pasó a recogerlo pero como lo importante son sus habilidades para bordar lo imposible a la hora de matar y no su famélica vida social no hay más problemas. En donde tiene que dar la talla es en las típicas volatadas que vemos habitualmente en el cine de acción y tiros y ahí el hombre rinde muy bien, cagándola únicamente cuando abre la boca y suelta alguna frase supuestamente intelectual.

Este cine va siempre directo a la yugular y se mueven lo suficientemente rápido para que uno no se par a pensar sobre las probabilidades de lo que acaba de ver se puedan dar. Hay mucha acción, muchos tiros, muertes espectaculares y de cuando en cuando la gente habla en ruso que queda como muy cool pero si realmente pensamos en la película, es un tanto floja y no creo que la recuerde en unas semanas.

Si careces de cerebro, si hablas en lenguaje esemés y jamás has leído un libro, entonces esta te va a encantar y lo mejor es que puedes ir con el clan completo de orcos y todos saldréis gruñendo y gritando del cine. Por lo demás, hay mejores cosas en la cartelera pero allá tú.
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