Hoja de ruta del 2011


Acabamos de cerrar el séptimo año de mi vida contado en un diario uno punto cero, abierto a todos y en el que prácticamente cada día hay dos anotaciones que lee quien le place. Siguiendo la pauta de los últimos seis años, aprovecho para montar mi hoja de ruta con las cosas que digo que quiero hacer y que finalmente no haré. Buenos ejemplos los tenemos en las anteriores, las relativas al año 2010, 2009, 2008, 2007, 2006 y 2005.

En este 2011 que acaba de comenzar, si hay un sitio en el que jamás me veréis es en los rincones dosputocerolistas en los que bosmongolos y otros infrahumanos se reúnen. Yo me mantendré en mis treces y observaré con sorna y cachondeo como cada vez vamos quedando menos y a la vez que aireas tu vida, menos gente se preocupa por ella porque no la envasas en el lugar de moda y no la sirves con los condimentos adecuados. Aunque pueda parecer algo asombroso, Distorsiones seguirá siendo un lugar abierto en el que el único juez soy yo. Como no quiero que haya rencores, mando un envenenado saludo a esos que habitan en el tuiterota y en el caraculolibro y aprovecho para desearles todo lo peor, siempre, como diría cierta rata asquerosa que gracias al dosputocerolismo abandonó el universo de las bitácoras.

Entre las cosillas que ya cuentan con una resolución firme está un glosario para explicar algunas de las palabras y frases que de cuando en cuando caen por estos lares y que algunos parecen desconocer. Como en cada región las palabras problemáticas son distintas, tendrán que colaborar los que padecen mi falta de dominio del español y mi mal uso del mismo. Quiero también procurar ser fiel al espíritu de la nueva ortografía e intentaré usar pocas palabras en inglés o convertirlas, con lo que se acabaron los gays y en su lugar tendremos el más rumboso maricones que hemos usado toda la vida y que es menos dosputocerolista pero más contundente (todavía me acuerdo de aquel julandro que se metió a autor de bitácora profesional sin éxito y que me denunció en su pútrido rincón y que no consiguió ni el apoyo de los otros perdedores de aceite, aquellos si que eran buenos años, cuando en las bitácoras teníamos hasta guerras).

Este dominio está pago hasta el año 2014 y al ser un año impar, en septiembre del 2011 se abrirá un periodo de donaciones para aquellos que quieran pagar de alguna manera los buenos y los malos ratos que pasan por aquí. Al ser un año impar también será un año de regalos, algo que anunciaré próximamente. Lo que sí que es cierto es que Distorsiones no va a terminar pronto.

En el 2011 seguiré incrementando mi libro de Recetas de cocina y como siempre seguiré buscando la forma de juntarlas todas, darles algo de orden y montar un pequeño libro. Seguiré también haciendo fotos de la comida que cocino y algunos privilegiados hasta disfrutarán de la misma compartiendo mesa conmigo. Cuando tenga alguna receta nueva, la veremos en viernes, ya que ese es el día para este tipo de anotaciones.

Durante la semana, normalmente de martes a viernes y en ocasiones también durante el fin de semana seguiremos viendo fotos de los distintos viajes que hago y de las actividades lúdicas en las que me embarcan mis amigos. Terminaremos con Malasia y después de George Town vendrá Langkawi, el parque nacional de Taman Negara y Malaca. Pasaremos por Camboya y por Hong Kong y también tendremos algunas fotos de lugares en España (quizás Córdoba y Sevilla, puede que Zaragoza o incluso Santiago de Compostela o Cádiz) y de los Países Bajos. El club de las 500 seguirá recibiendo a aquellas imágenes que cruzan ese umbral e imagino que de cuando en cuando sucederá algo que me obligue a reorganizar la única parte de mi bitácora que está muy bien planificada.

Seguiremos viendo fotos de Bicicletas ya que tengo un montón y prácticamente cada semana consigo algunas nuevas. Normalmente las vemos los martes por la noche pero puede suceder y sucede que las muevo a otros días o incluso hay alguna semana en la que no tenemos ninguna. La culpa la tiene lo prolífico que sea y la vida social, que ser de la vieja escuela, de esa conocida como uno punto cero implica grandes sacrificios sociales y mi vida es muy activa en ese sentido gracias a los amigos y conocidos que no me faltan y que hacen que mi agenda ande siempre rebosando de citas.

Mi objetivo para el 2010 era superar las 150 películas vistas en el cine y lo he conseguido ya que fueron 152. Para este año quiero igualar o superar esa marca y como el año tiene 365 días supone el ver una película cada 57 horas. Mi amigo el Niño se apuntará a gran parte de las mismas ya que compartimos afición e imagino que Waiting y otros también vendrán conmigo a algunas de esas películas. Las críticas estarán todas por aquí conformando la programación de los fines de semana y seguro que levantando más de una ampolla.

Este año habrán algunas obras en mi casa (la primera está planeada para finales de enero) y de eso alimentaré la bitácora mostrando los cambios según suceden. De esta forma mis amigos y familiares pueden ser partícipes en la distancia de esos proyectos en los que involucraré a mi vecino y algunos de mis amigotes, que van a tener que demostrar lo mucho que me quieren currando.

Los viajes seguirán en el tronco de esta bitácora. En el año que acaba de terminar me monté en treinta y un aviones, recorrí más de sesenta y cinco mil kilómetros que equivalen a una vuelta y media a la tierra y aún así me parecieron pocos. Este año quiero volver a Málaga, Estambul, pasaré por Gran Canaria (quizás de nuevo con el Niño), iré a Nuremberg con el Rubio para emborracharnos en los mismos lugares en los que nació nuestra amistad hace diez años y seguramente volveré a Asia aunque aún no tengo ni idea de cuál será el país. Si er Pisha de Cai se anima iremos juntos a la Antártica y seguiré los caminos abiertos por las compañías de bajo costo desde los Países Bajos para escaparme allá a donde me lleven.

Siempre digo que quiero recuperar los relatos y nunca lo hago así que ahí queda. Me he comprado un programa para ayudarme a escribir un libro y espero usarlo aunque seamos realistas, le tendría que robar tiempo a esto y a la fotografía y no creo que lo haga. También estoy tratando de forzarme a escribir un desvarío a la semana e incluso tengo una idea para una de esas series pero imagino que se me irá el fuelle según avance el año. Como tradicioinalmente dgo que quiero continuar con Planta 33, ahí queda dicho y así mantenemos esa bonita tradición. Espero sacar algún nuevo capítulo del Hembrario y algún día haré la trilogía Láctea que llevo macerando más de diez años y que consta de tres historias cortas y contundentes que me agenciarán otra ristra de enemigos. Seguiré hablando de la amistad, de las experiencias positivas y de todo aquello que me place ya que mis manos no están atadas y corren sobre el teclado produciendo aquello que desean.

Los lunes por la mañana tendremos el Resumen semanal que nadie lee pero que a mí me sirve para revisar lo que he hecho y enderezar el rumbo si es necesario. Mi ritmo se mantendrá como hasta ahora, con una foto por las mañanas y alguna otra cosa por la noche, distorsionando tanto como pueda y quiera.

En todo este batiburrillo de ideas, los comentaristas tendrán su papel como hasta ahora. Veremos en qué queda todo ?? 


5 respuestas a “Hoja de ruta del 2011”

  1. Este año sí que me he acordado de que cumples en un día tan peculiar. Muchas felicidades.

  2. a ver si nos centramos un poco y felicitamos en el lugar adecuado, que cualquiera diría que son todos dosputocerolistas con perfil en el caraculolibro ese.

  3. Estoy con un móvil de los táctiles esos, y no sé cómo me abrió lo de los comentarios en esta entrada. Bueno, pues de nada, ¿eh? 🙂 Que cumplas muchos más…