Las hembras que iban a la terma del Foro en Ercolano tenían su precioso mosaico y los machos un patio para correr y desfogarse. Este era un patio central desde el que se podía acceder a las diferentes dependencias de las termas y en el que los más fachentos hacían ejercicios para que la gente los viera y fliparan con ellos. El patio estaba rodeado por una columnata, algo que ya vimos en las fotos de Pompeya solo que aquellas termas eran gigantescas si las comparamos con estas.