Cada vez llego con más miedo al fin de semana porque es cuando se dispara mi actividad y después paso la semana agotado. Eso mismo sucedió hace una semana y No pudo ser ?? lo de descansar un poco. Mirando hacia las navidades, ya tengo un montón de fines de semana totalmente bloqueados. En fin, pobre de mi. Estos días he estado Volviendo a la pista de hielo e iré a clases hasta las navidades. Eso se suma al italiano y todo lo demás para agravar mi crónica falta de tiempo.

Aunque lo instalé desde que apareció, aún no había comentado nada del iOS 6 y he aprovechado para remediar esa falta.

Regresó uno de los resúmenes habituales en la época fría. Tuvimos un Popurrí de fotos de septiembre con las más populares de las cuarenta y pico mil que hay en mi cuenta de flickr.

Seguimos viendo fotos de la Floriade, la cual cerró este fin de semana y nos centramos en los pabellones. Comenzamos con el horripilante Pabellón de Holanda, seguimos con el atroz Pabellón de España, seguimos con el modosito Pabellón de Azerbaiyán y acabamos en el luminoso Aqua Pavilion Floriade. Durante el fin de semana le dimos la bienvenida al Club de las 500 al Templo de Hung Shing en el club de las 500 y a unas Rosas blancas en el club de las 500. En los próximos días acabaremos con la Floriade y la semana que viene seguramente comenzaremos con Budapest, asumiendo que acabo de procesar las fotos a tiempo, lo que todavía parece posible.

Esta semana vimos una Vanmoof 5, una bicicleta que lleva la cadena para amarrarla ya incluida y que tiene un aspecto muy futurista. Algún día de estos la pondré en el álbum de fotos de bicicletas.

Aunque fui al Cine a ver cuatro películas, por un despiste solo comenté dos. Comenzamos con la curiosa y divertida Ruby Sparks y acabamos con otra comedia solo que de humor muy negro y macabro llamada God Bless America. Sigo a buen ritmo y parece que llegaré al objetivo de las 150 películas a comienzos de noviembre. Por ahora, el contador se ha detenido en ciento treinta y tres.

Antes de ver las fotos de lo que cociné la semana pasada, recordar que cuando no como en mi casa suelo capturar también esa comida y acaba en Comida en fotos. Así, veréis que tropiezo una y otra vez en la misma piedra y estuve comiendo costillas en el Café Cartouche además de tomarme mi primera bokbier de esta temporada. Dicho esto, la comida con la que alimenté mis sesenta y cinco kilos fue la siguiente:

Y así transcurrió la semana …