Volvemos a la normalidad después del empacho de la semana pasada. Estos días han pasado tranquilamente, disfrutando de la primavera recién llegada y de todas esas horas de luz que hemos ganado. Se puede decir que esta ha sido una semana de transición aunque no sé muy bien hacia donde. Hablé de Un golpe de suerte que he tenido y también se destapó el baúl de los recuerdos con Farfullo. Por lo demás, me he dedicado a trabajar en mi jardín y prepararlo para la temporada que ha comenzado.
Después de la saga americana es hora de ponernos al día con el Club de las 500 y todas las fotos de esta semana han sido nuevos miembros de ese club, el cual os recuerdo que está compuesto por aquellas que han alcanzado las quinientas visitas en flickr. Tuvimos Flores blancas en el Club de las 500, Narciso Chromacolor en el Club de las 500, Margaritas blancas en el Club de las 500 y Staromĕstská radnice en el Club de las 500.
El capítulo principal de esta semana ha estado dedicado al Cine con 300 la cual desde ya mismo es un clásico que deberíais ver y también con la más que mediocre Paris, Je T’aime, la maravillosa Das Leben der Anderen – La vida de los otros y la mierdosas Hannibal Rising – Hannibal, el origen del mal y Gwoemul – The Host. Un montón de cine y aún me quedan varias películas pendientes. Este primer trimestre que acaba de cumplirse he visto veintisiete películas. Si mantengo el ritmo este será un año de records.
Acabamos con una nueva receta para la sección de Cocinillas. Se trata de Pollo con beicon y puerro y solo por ver la foto os recomiendo mirar la receta. Está deliciosa.
Para aquellos a los que la fiebre primaveral vuelva generosos podéis visitar mis listas de regalos y retrataros:
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Y como siempre me están preguntando sobre la cantidad de páginas, visitas y similares que tiene mi bitácora os dejo con la gráfica de los tres primeros meses del año que muestra lo estancada que está en mil páginas diarias de media, las cuales son muchísimas más de las que uno esperaría de un lugar con tan baja calidad y suficientes para alimentar mi ego.
