Mi segunda película española fue una comedia de la que jamás había oído hablar pero como la protagonizaban los de Aída, pues decidí darle una oportunidad ya que guardo buenos recuerdos de esa serie, al menos de las primeras temporadas porque en un cierto punto como que me cansé de tanto más de lo mismo. Después de estar en un cine mayormente vacío el día anterior, me sorprendió que la sala estaba medio llena y que todos parecían muy ansiosos y dispuestos a reírse. La película se titula La tribu y está en la cartelera como que ahorita.

Un julay sin memoria se encoña de una profesora de gimnasio y descubre que su vida es una mielda del copón

Un chamo que resulta que era director de recursos inhumanos en una empresa que echó a la puta calle a trescientos julays, resulta que se hace famoso porque el mismo día que hizo eso se quedó pegado a su becaria mientras se la follaba en la oficina y el vídeo en el llutuve lo hundió. Un año más tarde intenta suicidarse y su madre natural, a la que no lo conocía, lo rescata y se lo lleva a su casa ya que no recuerda nada. Allí descubrirá una vida en un ambiente totalmente distinto y encontrará nuevas razones para vivir.

Esta es una comedia con muchas escenas que parecen sacadas de otras películas pero en la que te ríes por igual. Hay mucho número de música, aunque no cantando sino de bailoteo, ya que Carmen Machi resulta que pertenece a un grupo de puretas a las que les va el baile. La química entre esta mujer y Paco León sigue funcionando, sus escenas juntos son de fábula y aunque en muchas ocasiones tienes la sensación que es más bien un episodio de una serie cómica que una película, te diviertes, que es de lo que se trata. La dirige Fernando Colomo, uno de los maestros de la comedia españoles. Paco León tiene sus momentos para lucirse, sobre todo en la primera parte cuando no se acuerda de nada y se suceden sin pausa los momentos cómicos, en el tramo final, aumenta el drama y la película pierde fuelle, no estábamos en el cine para ver eso y le pasamos factura por ello. Parece que en España el cine es de hora y media y no hay tiempo a que se haga pesada. Es curioso como a la hora de hacer series de televisión las estiran como el chicle pero con el cine son extremadamente comedidos. La película trata de introducir en el mercado también una canción y en los títulos de crédito la repiten con tomas chorras de los diferentes grupos de julays que participaron. Está bien pero tampoco es una que recordaré por y para siempre.

Al ser un humor directo y sencillo, puede atraer y entretener a los miembros del Clan de los Orcos pero definitivamente, está totalmente fuera de la órbita de los sub-intelectuales con GafaPasta.