La semana pasada vimos el Monumento a José Rizal en el Parque Rizal y hoy repetimos con otra vista. Básicamente lo estamos mirando por detrás y ni siquiera se puede ver a la guardia de honor que están por el otro lado del obelisco. Al fondo está el mar y el paseo costero que creo que será el tema de la siguiente foto. El parque es una gran extensión de hierba pero durante el día es más o menos un lugar del que todo el mundo huye como la peste porque el sol ahí es inmisericorde. Los laterales de este parque están llenos de mendigos y gente que parece vivir en la calle y los niños esos que esnifan pegamento y que te pueden hasta matar sin que les pase nada porque son menores de edad. La zona es para llegar, hacer la foto y salir por patas. Igual por la tarde cuando se pone el sol hay más vidilla por allí. En mi primera visita, este fue el lugar en el que pillé el taxi que me llevó de vuelta al hotel para coger la maleta y seguir hacia el aeropuerto.