Seguimos con viejas películas de terror que vuelven a hacer aunque no haya necesidad alguna solo porque hay una nueva generación de julays que parece ser que no saben como buscar en sus plataformas de contenido audiovisual por las mismas y verlas en la comodidad de su keli. Como con muchas anteriores, han actualizado la historia para hacerla más DosPutoZero pero vamos, que es lo mismo con un barniz de modernidad. En este caso la película es Child’s Play y se ha estrenado este fin de semana en España con el título de Muñeco diabólico que creo que recuerda mucho al título original o es el mismo.

A un julay piojoso y muerto de hambre su madre le regala un juguete con procesador digital y tal y tal y el sistema operativo está pero que super-hiper-mega jodido.

Un chiquillo vive con su madre y son básicamente pobres y se han mudado a un nuevo lugar. Ella trabaja en una especie de hipermercado del juguete o así y se queda con un muñeco que supuestamente tiene inteligencia no-natural porque está escoñado y se lo da a su hijo. El muñeco, como que va a su movida y desde el principio tiene una visión muy liberal del hacer putadas a la gente. La cosa se le irá de las manos al niño y aquello acabará en una batalla final entre el ser humano y el inhumano.

Para ser una película de terror, a la hora de aligerar el guion se cargaron todos los sustos, que no los hay. Tenemos asesinatos hechos por el muñeco, ahora con procesador de ultimísima generación y con un motivo claro y que se explica en los primeros dos minutos de por qué lo hace, con lo que se elimina también cualquier teoría sobre efectos para-anormales de esos. Lo que nos queda es una sosa historia de un muñeco que mata a destajo y según le conviene y que abusa de su supuesto dueño en primer lugar y posteriormente se plantea matarlo. Los actores son todos gente desconocida y que mayormente no sabe actuar pero les dieron dos bocadillos de chorizo y un sobre con monedas y se prestaron a participar. El director debería ver al menos dos películas de terror antes de plantearse dirigir una y realmente no se puede decir mucho más. Lo mejor de la peli es que en el cine tienen un aire acondicionado fabuloso. Sin ser mala, tampoco es buena, es más bien, mediocre.

Esto no creo que sirva para enaltecer a las masas de los miembros del Clan de los Orcos pero sí que puedo asegurar y aseguro que enfurecerá a cualquier sub-intelectual con GafaPasta que la vaya a ver.