Una de las pequeñas empresas que fabrican bicicletas muy particulares en los Países Bajos es onderwaterfiets (lo cual se puede traducir pachangueramente como bicicletas bajo el agua o quizás submarinas). A esta empresa le gustan las bicis en las que el padre (o la madre) lleva a todos los niños con su propio asiento y volante en la bici pero sin usar una cesta como las bakfiets. Sus bicicletas son larguísimas y la que tenemos hoy y que no se puede apreciar muy bien me la tropecé cerca de la casa de Waiting en una de las raras ocasiones en las que ha estado en los Países Bajos desde su exilio. Prestando atención se ve que llevan a un niño en la parte de atrás y a otro sentado por delante y el adulto va en el medio. El precio de esta configuración es de entre 1500 y 1650 euros dependiendo del número de velocidades que se quieran y decir que se le puede añadir un asiento adicional para otro niño delante de la madre, con lo que puede transportar hasta 3 retoños.