La BBC se ha ganado una familla de hacer documentales de naturaleza increíbles, tan jodidamente buenos que se estrenan en los cines para poder disfrutarlos bien, en pantallas enormes y con un sonido espectacular. En ellos combinan una historia muy trabajada y con un hilo claro con todo lo que ruedan de diferentes animales y que siempre son imágenes que no dejan indiferente a nadie y despiertan en algún lugar de nuestro interior cosas que ni sabíamos que teníamos. Pues bueno, One Life debía ser una de esas pero parece que algo falló y no consiguió el efecto esperado. La película no tiene fecha de estreno cinematográfico en España pero imagino que sí que llegará a través de la tele.

Qué julays que semos los animales con y sin la gloria de Chanquete

One Life nos habla de la vida, de ese único e irrepetible accidente que hace que todos estemos aquí y de como estamos programados para tratar de evitar los peligros y vivir lo más posible al mismo tiempo que tratamos de reproducirnos.

La película tiene una dosis suficiente de imágenes espectaculares que por supuesto comienza en uno de los polos, algo que ya comienza a parecer la marca de la casa en los documentales de la BBC. Después vamos viendo segmentos sueltos, supuestamente relacionados pero sin una trama clara. Así, saltamos del hielo al desierto, al bosque, a la jungla, al agua, a las montañas y en cada uno de esos saltos tenemos una historia. Lo que falló es que el trailer es absolutamente brillante y la película es mediocre, le falta chispa, aburre en ratos largos, la falta de conexión entre segmentos y lo rápido que los dejamos atrás para ver nuevos termina por desquiciar al espectador y si hubiera estado en mi casa tirado en el sofá y esto lo hubieran dado por la «2», me pego una sobada de escándalo. Esta historia la narra Daniel Craig y su voz no hace nada por ensalzar el producto, es monótona y tediosa. Hay un par de momentos increíbles que se te olvidan pronto en un océano de imágenes que no llaman la atención y que te deja con un mal sabor de boca. Esto pudo haber sido un peliculón pero se quedó en otro documental de naturaleza más, uno que estrenaron en el cine pero que ni siquiera merecía ese honor.

Ya sabéis que el uso de la palabra documental excluye y protege a cualquier miembro del Clan de los Orcos así que ninguno de ellos debería pasarse por un cine en el hipotético caso de que la estuvieran dando. Para el resto, tampoco es algo que debería estar en vuestra lista, también podéis esperar a que lo den por la tele y no habrá una gran pérdida.