Lo único bueno que tiene la llegada del verano es que las comedias comienzan a asomar en las pantallas del cine. Esto es bueno y malo porque en el mundillo de las comedias, las mierdas abundan que no veas y además, los trailers las suelen destruir ya que para ocultar la bazofia que pretenden colocar, ponen los cuatro buenos momentos en el trailer. Al regresar de mis vacaciones en Asia, la primera comedia que fui a ver se llama I Feel Pretty y al parecer llega a España a mediados de junio con el fantástico y fabuloso título de ¡Qué guapa soy!.

Una julay vacaburra se encochina que no veas

Una obesa acostumbrada a comerse piaras de cerdos porque uno solo como que no la llena y que vive traumatizada porque sabe que todos sabemos que es obesa tiene un accidente al destruir material del gimnasio por su exceso de peso y tras el mismo como que se cree guapa y perfecta aunque todo el mundo la ve encochinada. La tipa encontrará otro trabajo en su empresa, mejorará, ganará en autoestima y hasta conseguirá un novio que hasta parece normal con todo el mundo flipando porque ella habla de si misma como si fuera una super-modelo noréxica-bulímica.

Mira que lo tenían fácil teniendo a una protagonista gorda con amigas gordas y trabajando para una empresa de tías anoréxicas pero es que consiguieron hacer un producto soso y que como siempre, tiene lo mejor en el trailer. La cosa es que no hay química entre los protagonistas y los diálogos son muy forzados y vuelvo a recordar que es una comedia pero raramente te ríes y casi que pasamos más tiempo deprimidos con el triste mundo de esta pobre y sus amigas gordas y feas. La película fracasa en lo de crear algo de empatía entre los espectadores y ella y en las pocas ocasiones en las que te ríes, esa escena seguro que te suena porque ya la habías visto en alguna peli anterior. No hay nada original, es un refrito de más de lo mismo y Amy Schumer no está en absoluto al control. Es una pena que hasta la siempre fantástica Michelle Williams aquí esté peripatética. En la parte menos negativa, al menos vemos claramente como os ninguneamos a vosotros los obesos por culpa de esas lorzas que tanto gusto os ha dado hacerlas.

Esto no tiene el humor grosero que gusta a los miembros del Clan de los Orcos y tampoco tiene el humor intelectual que gusta a los sub-intelectuales con GafaPasta. Se queda en una especie de telefilm que van a estrenar en los cines pero que igual habría sido mejor que lo dejaran para la tele y que te la topes por sorpresa, sin haber visto jamás el trailer.