Risotto de setas


La semana pasada tuvimos en esta sección la receta de Risotto de manzana y nueces con gorgonzola y ya dije entonces que pondría otra. Lo que sucedió fue que preparé bastante risotto (en su receta básica) y así pude cocinar dos variantes distintas. Como ya comenté si uno prepara la receta básica, la puede guardar un par de días en la nevera en un tupperware, lo cual lo hace perfecto para impresionar a amigos o visitantes casuales y tener lista la comida en unos pocos minutos cuando estos aparecen.

Imagino que el gandulismo y la desidia habituales harán que no miréis la receta en la otra anotación así que volveré a repetir la parte básica en esta. Comentar que para cocinar este risotto tendréis que hacer una ronda por el supermercado o mejor aún por el mercado y comprar setas variadas. En Holanda se venden bandejas con una selección de tres o cuatro tipos y por supuesto, si vais al mercado podéis encontrar muchísimas más. Podéis aumentar el sabor un poco si conseguís setas secas y las añadís al resto.

Repitamos la receta básica de risotto:

Los ingredientes para unas cuatro personas son: medio litro de caldo de pollo, 1 cucharada de aceite de oliva, una cucharada de mantequilla, una cebolla mediana, un par de ramitas de apio, 300 gramos de risotto y 125 ml de martini o vino blanco seco.

La implementacion: Como ya dije, cocinar risotto toma su tiempo y hay que estar continuamente removiendo, así que a tomárselo con calma. Pela la cebolla y pícala finamente. Pica también el apio y prepara el caldo de pollo. Si quieres guardarlo para terminar la receta más tarde entonces ten preparada una bandeja grande que tendrás que untar con un poco de aceite. Te puede valer la bandeja del horno. Pon en un sartén grande el aceite de oliva y la mantequilla y cocina la cebolla y el apio a fuego no muy fuerte durante unos quince minutos. Pasado ese tiempo la cebolla está borrachita y puedes añadir el risotto (no vale un arroz normal, búscalo en el supermercado o en tu tienda favorita) y pon el fuego al máximo mientras remueves continuamente. Tras un par de minutos removiendo la mezcla y con el arroz silbando añade el martini o el vino blanco y notarás como el alcohol se evapora al momento. Sigue removiendo sin parar hasta que se evapore el martini y quede el arroz. A partir de este momento tendrás que ir añadiendo cada vez un cucharón de caldo de pollo y remover hasta que lo absorba el arroz y cuando esto sucede, añade más caldo. Con el primer cucharón baja el fuego para que el arroz no se cocine muy rápido pero tampoco lo pongas al mínimo o acabarás con un pudding. Sigue añadiendo un cucharón de caldo y removiendo hasta que lo absorba durante quince minutos. Pasado ese tiempo prueba el arroz, debería estar al dente.

En este punto es donde podemos parar la cocción si lo que quieres es hacer la receta más tarde o al día siguiente. Para ello extiende el arroz en la bandeja que untaste con un poco de aceite al principio para que se enfríe. Cuando el arroz esté frío, ráspalo con una espátula (o una cuchara) y guárdalo en un tupperware en la nevera.

Y ahora que hemos preparado la base, vayamos con el risotto de setas:

Los ingredientes: cincuenta gramos de mantequilla, dos manojos grandes de setas frescas variadas, sal y pimienta, media cucharada de hojas de tomillo picadas, 1 diente de ajo picado finamente, 350 mililitros de caldo de pollo, queso rallado parmesano, aceite de oliva, el zumo de medio limón y unas ramitas de hojas de perejil picadas.

La implementación: Calentar una sartén en la que ponemos un poco de mantequilla y cuando se derrita echamos las setas y las sazonamos con sal y pimienta. Cocinar removiendo durante un par de minutos y después de ese tiempo añadir el tomillo y el ajo y seguir removiendo y cocinando un par de minutos más o hasta que las setas se ablanden. Sazonar al gusto.

Después poner una sartén grande a fuego medio tirando a fuerte y echar en ella la mitad del caldo y luego el risotto de la receta básica. Remover continuamente y llevarlo a ebullición. Una vez hierva baja el fuego. Añade las setas y cocinar hasta que el caldo haya sido consumido casi por completo. A partir de este momento ir añadiendo un cucharón de caldo cada vez y seguir removiendo hasta que se evapore. Comprobad antes de añadir cada cucharón porque igual no os hace falta todo el caldo. El arroz se tiene que quedar especito y cremoso.

Cuando ya esté, apaga el fuego y echa el resto de la mantequilla, el queso parmesano rallado, el perejil y el zumo de limón. remover y tapar el caldero y dejadlo reposar durante uno o dos minutos. Ya está listo para servir. Es perfecto como plato principal.

Si quieres ver otras recetas que he cocinado puedes ir al índice de Mi pequeño libro de recetas de cocina y allí tienes la lista completa


7 respuestas a “Risotto de setas”

  1. MMmmmmm, qué hambre. Seguro que está de rechupete. De todas maneras, tengo un runrún en el cerebro que no me aclaro y es que no sé a qué me recuerda ese líquido blanquecino que cubre el arroz.

  2. ¿llegaste a cocinar el otro risotto? Este fin de semana he preparado dos recetas que aparecerán en el futuro por aquí.

  3. Todavía no, el otro día estuve mirando por el risotto pero no hubo manera de encontrarlo, y me da con el SOS o con Brillante no iba a ser lo mismo (al final tendré que ir al súper del Cutre Inglés que nunca falla), pero no dudes que lo haré, tengo la impresión de que es una receta con la que quedas bien con cualquiera, y la ventaja de preparar el risotto con antelación es impagable.

  4. En Holanda se consigue sin problemas. No me puedo creer que en un Carrefour o en un Alcampo no lo haya. Definitivamente no busques en un Lidl porque esos tienen más bien poco. Y sí, no compres arroz SOS porque no será lo mismo.