Sint Maarten Kerk


Sint Maarten Kerk

Desde la cima del Domtoren miras hacia abajo y puedes ver la Iglesia de San Martín, cortada y separada de su torre. A la derecha se ven los jardines del convento de monjas que se encargaban de mantener la iglesia funcionando.

Ya lo he dicho en otras ocasiones. Los calvinistas robaron la iglesia a los católicos y destruyeron todas las imágenes y frescos de su interior. El Dios de los católicos envió su respuesta reventando media iglesia y separando la torre del resto. Ahora los susodichos calvinistas tienen su nave vacía en la que se juntan dos docenas para escuchar al tipo que se sube al podio a desvariar entre viejas y beatas mientras que los católicos seguimos llorando por la pérdida de una de las catedrales más bellas y espectaculares de este país.

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3 respuestas a “Sint Maarten Kerk”

  1. El que roba a un ladrón… Algo habrán hecho unos para que otros les roben sus templos. Hay cientos de leyendas que hablan acerca de los recursos utilizados para sus construcciones. Una escuché muy curiosa. Resulta que hombres faunos desvastaron bosques para construir fuertes navios. Navegaron meses y meses hasta que llegaron a un lugar lejano. Allí se encontraron con animales que caminaban en dos patas. Los hombres faunos los confirmaron en su condicion y por ella los condenaron. Después destruyeron su templos y aniquilaron sus creencias. Quizás los calvinistas solo hicieron justicia como aquellos faunos creyeron hacerla con los bipedos animalejos.
    Quizás los católicos deberían llorar por las almas que se llevó la colonización o la inquisición. O los millones que mueren en Africa del Sida. O los niños de America Latina o por las niñas prostitutas de Asia. Quizás deberían llorar los católicos por la hipocresía, por la pedestria, por el horror, por la guerra, por la derecha y por la falta de amor.
    Good by. A Biantot. Deu. Chavales. Joder

  2. No creo que sean leyendas las cosas relativas a la construcción de las catedrales. Se hicieron con mano de obra local, explotada al máximo y con sueldos paupérrimos. Eso se ha sabido siempre. La iglesia era el poder en esos tiempos y el poder era la iglesia.

    También sabemos lo que sucedió en América. Llegaron los colonizadores y eran más fuertes y más violentos que los locales, así que arrasaron aquello. Es lo mismo que hacen hoy día otros imperios. Está en la naturaleza humana.