El jueves pasado quedé para ir al cine con el Niño y le mandé un SMS con el nombre de la película que veríamos y le sugerí que la revisara en imdB. Por descontado él no lo hizo, está demasiado ocupado manteniendo su pelo y su sonrisa en óptimas condiciones para que las penquillas de turno se dejen poner la pierna encima y cuando nos vimos en la entrada del cine, justo un minuto antes de que empezar la película y estuvo a punto de marcharse porque cuando vio el cartel comprendió que The Proposal es una comedia romántica y ese es un género al que le tiene aversión. Me dijo que me odiaría por lo menos dos horas y que bajo ningún concepto podía rozarlo por si alguien pensaba que lo nuestro era algo más allá de la amistad y yo que había leído varias críticas le comenté que se tendría que tragar sus palabras y que dos horas más tardes estaría de acuerdo conmigo en que La proposición es una buena comedia. En España se estrenará en julio.

Una penca de julay es la jefa de un panoli al que obliga a comerle el potorro si quiere llegar a algo en esta vida aunque sea sin ilusión ni fantasía

Una chama ejecutiva super-agresiva y con una mala hostia legendaria que aterroriza a sus empleados y se las hace pasar canutas a su asistente personal, un chavalote guaperas que la sigue a todos lados tragando mierda a porrillo. El servicio de inmigración americano le informa que la van a deportar a Canadá por no haber regularizado su situación y a ella no se le ocurre otra cosa que amenazar a su empleado y obligarlo a casarse con ella. La cosa se complica y cuando ambos van a casa de la familia de él para el 90 cumpleaños de su abuela ambos se sorprenderán con lo que descubren del otro.

En los primeros diez minutos de película esta es una comedia romántica más bien mala. Todos los clichés que conocemos desde siempre se repiten y no hacen maldita gracia. Salva esas escenas únicamente el carisma personal de Sandra Bullock, una actriz que siempre ha conseguido enamorar a la cámara. Cuando ambos protagonistas toman un avión y marchan para Alaska la película se va transformando poco a poco y se va enriqueciendo con un elenco de secundarios que arrancarán risas a destajo en la sala y también porque la química entre Sandra Bullock y Ryan Reynolds funciona perfectamente y pese a la diferencia de edad entre ambos, termina contagiándose a los espectadores. Podría comentar que hubo momentos en los que me entraron ganas de abrazar a Betty White, una de las legendarias Chicas de Oro interpretando a una abuela genial, que la madre del protagonista me recordaba un montón a Ana Rosa Quintana (o al menos el recuerdo que tengo yo de ella de hace unos años porque desde hace por lo menos un año no recuerdo haberla visto en la tele) y que si ya tenía en mi lista a Ryan Reynolds como uno de los actores a seguir, ahora está directamente en el selecto grupo de los que son razón suficiente para ver una película en el cine. Podría comentar un montón de cosas más pero no lo haré. Es una comedia buenísima, entretenida y aderezada con unos paisajes de Alaska tan increíbles que ya estoy totalmente determinado para ir a ese lugar del mundo y pasar allí un par de semanas de vacaciones.

Vete una tarde de domingo con la chama a ver esta película. Ambos os lo pasaréis bien.