Transporter 3


De cuando en cuando se me va el santo al cielo y me arriesgo con cosas que suelo evitar como la peste. Casi siempre es porque intento cuadrar un par de películas para hacerme una sesión doble y después de fijar una de ellas, para la otra no hay mucho donde elegir y termino viendo lo que termino viendo. Así he llegado a Transporter 3, sin haber visto las dos primeras y sin que me importara demasiado.

Un julay apatrulla la Comunidad Europea en un coche tuneado equipado hasta con putilla del Este de la Unión

Un tipo que al parecer se dedica al transporte de una forma que más bien bordea la ley recibe en su casa una visita inesperada cuando un amigo se le empotra en el salón con su coche. Sin saber muy bien como acaba conduciendo por Europa con una putilla en su coche y sin poder abandonarlo porque llevan unas pulseras-bomba. Irán saltando de país de gentuza en país de gentuza y también saltándose la ley y lo que haga falta mientras los malos asoman por doquier y ellos corren que no veas aunque no sabemos muy bien ni a dónde ni por qué.

Cuando el guionista no se aclara con la historia y no logra hilvanar las cuatro escenas que tiene en mente, el castillo de naipes se desmorona y da igual que hayan tiros por doquier, que la putilla enseñe chicha o que el protagonista suelte de cuando en cuando una frase sacada del Gran Libro de los Poligoneros y acaricie su coche tuneado. Esto es más o menos lo que ha sucedido aquí, con una historia que hace agua y en la que los intervalos entre escenas de acción se hacen tediosos hasta niveles intolerables. No hay un gran trabajo de los actores y actrices, no sabemos si saben actuar o si los habrían dejado hacerlo de tener un buen guión entre manos y lo único que parece claro es que había que llenar minutos con carreras de coches increíbles y tiros y más tiros para que los descerebrados alucinen en colores y crean que han visto algo bueno.

Si hubiesen cuajado el ritmo nada de esto habría importado y ahora estaría hablando de una pasada de película pero la han petado y no han conseguido pasar de un suspenso alto, de un producto aburrido y soso que no brilla por nada y se olvida tan pronto como se termina de ver. Lo intentaron con algunos golpes humorísticos pero no funcionó, lo volvieron a intentar con algo de tensión sexual que tampoco funcionó y lo único que nos queda son esas inverosímiles persecuciones en las que las volatadas caen a dos por minuto.

Una película solo apta para intelectuales que jamás hayan leído un libro y pibas de chulos con coches tuneados. Los demás no deberíais esperar ni a que la den por la tele, no lo merece.

03/10


2 respuestas a “Transporter 3”

  1. La primera me dejó un buen recuerdo, aunque ahora no la recuerde para nada, pero vamos, que tengo esa sensación…