Último día buceando en Amed y traslado a Nusa Lembungan


En realidad si quieres leer esta serie desde el comienzo, tendrás que saltar a Regresando al viaje a Asia para ver las fotos y avanzar desde allí y por si la cosa no es complicada, esta saga de fotos y vídeos está relacionada con el relato que comenzó en Desde Utrecht a Kuala Lumpur y si estás confundido, pues que sepas que así es la vida

A pasado un tiempillo por circunstancias de la vida, que es así y no hay mucho que podamos hacer para controlarlas. el siguiente episodio en la saga de buceo era mi segundo y último día en Amed, en donde hice dos inmersiones más y desde allí me iba a Nusa Lembongan, una isla pequeña a la que se accede con unos barcos petados de motores. La anotación en la que lo contaba todo es esa titulada Buceando en Banana y la pared Jemeluk antes de ir a Nusa Lembungan.

En realidad, toda la parte de buceo en Amed nos la saltamos y hay que esperar al vídeo. El coche que me llevó desde allí hasta el punto en donde se cogían los barcos me dejó cerca del que vemos en la foto, petado de motores, como si fueran gibraltareños. Los barcos van a todo meter en el trayecto, que es de unos cuarenta minutos y si hay mala mar, algunos se acuerdan de toda la familia de los de la compañía:

El barco para ir a Nusa Lembungan

El acceso al barco es por los lados del primer y el último motor, en un micro-pasillo y hay que dejar las cholas en unas cajas y te las devuelven al llegar. Los julays que están por delante de mi en la foto son los porteadores, que sacan y entran el equipaje y la carga de todo el mundo, que estos barcos también se usan para llevar carga a la isla. En el vídeo, al final, hay un pequeño segmento en el que se puede ver las construcciones para entretener chinos en la costa de Nusa Lembungan. Me quedé en otro centro del Two Fish Divers, igual que en Amed y este estaba a cargo de una pareja española. La habitación, pese a lo que digan las malas lenguas comentaristas, era muy chula:

Habitación en el Two Fish Divers en Nusa Lembungan

Ese día no hice mucho más y fuie a cenar al Maria’s Boemboe Warung, que estaba prácticamente en la puerta del complejo. El sitio se llena (vamos, los pocos puestos que tiene y la comida es muy buena, pero si pasas por allí sin haber leído las críticas o preguntado en tu motel, no entras ni de coña, con el andamio de madera, la arena de suelo y los perrillos que están por allí echados y que en varios carteles dice que no los toques para que no te muerdan. La mesa única es una enorme L y todos estamos sentados unos al lado de otros. El cocinero no ha descubierto la multitarea así que preparan los platos de uno en uno y como vayas en un grupo de cuatro o seis, la comida va a durar más que una acampada de delincuentes truscolanes en Barcelona.

Maria’s Boemboe Warung en  Nusa Lembungan

Como la comida estaba tirada de precio, me pedí dos platos principales y que sea lo que Dios y el jiñote quieran. Comencé con este:

Comida de Indonesia

Y después ayudé a empujarlo gaznate abajo con éste otro:

Fideos con frutos del mar

Salí de allí requintado y con el tripote lleno.

En el vídeo con el resumen del buceo tenemos un montón de corales, un pez león y sobre el minuto cuarenta y cinco segundos tenemos a la tortuga de este vídeo. Seguimos con una sobredosis de corales y bancos de crías de peces y al final vemos la llegada a Nusa Lembungan en el barco y pasamos junto a lo que parece una chabola acuática y que es una especie de parque acuático para chinos, que los traen en barcos especiales, les dan la vuelta a la isla, los llevan a ver las Mantas y después los meten ahí para que se cansen y gasten dinero y jamás de los jamases llegan a poner una pezuña en la isla. En algún momento del vídeo sale el Elegido, en una de esas rarísimas ocasiones en las que se deja ver. La canción es La Fuerza Del Destino de cierto grupo poco conocido llamado Mecano. Si el vídeo no está debajo de este párrafo, lo tenéis AQUÍ:

El relato continúa en Aquel épico día en el que buceé bajo las mantarrayas y hasta hubo mucho más

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2 respuestas a “Último día buceando en Amed y traslado a Nusa Lembungan”

  1. Pues hiciste muy bien en pedir dos platos, con ese tamaño se los endiña uno sin problemas, con la gazuza que da el buceo, además, tienen muy buena pinta, lo malo es que suele picar todo mucho y a mi no me va el picante por razones de retaguardia… 🙂
    Salud

  2. Así que «Ha pasado un tiempillo»… ehem… y las malas lenguas comentaristas a las que te refieres, usease, yo misma, aunque no sea fan de la decoración de la habitación, el suelo se ve que hasta refleja de limpio, para mí, suficiente!