Otra foto que hice en la isla de Duy Vinh de una laguna (aunque estoy convencido que estaba conectada al mar por algún lado) rodeada por un espeso bosque de palmeras y con una barquilla con sus ojitos. Por la vera derecha se puede ver la keli de alguien. Al estar la barca allí, supongo que alguien estará pescando allí. El precioso azul del cielo engaña un montón, se ve idílico pero estábamos a cuarenta y pico grados y el calor era truscolán.
Categoría: Hanoi
Álbum de fotos de Hanói
El tamaño infinito de mi bondad es legendariamente conocido y admirado por algunos entre los que me cuento y como yo soy más bien de los que prefieren que les pongan un pase de fotos en un tiempo determinado, he creado un vídeo con todas las fotos que hemos visto de Vietnam y muchas más que fueron descartadas pero que estaban en la selección original. Para acompañarlo, he elegido la canción This Will Be (An Everlasting Love) de Natalie Cole que no recuerdo si ya he usado pero que tampoco me preocupa en absoluto:
Teleférico en la jungla
Le ponemos el punto final a la serie sobre Hanói y alrededores con esta imagen del teleférico que sube a la parte superior de la Pagoda Perfumdad. Las excursiones llegan tras un pequeño paseo por el río y después de ver la parte cercana al mismo, se sube al templo que está más cercano a la cueva con un teleférico que nos lleva volando sobre la jungla. Para regresar, puedes optar por el teleférico o volver andando por un camino que te lleva por multitud de pequeños mercados en los que se venden recuerdos y otras cosillas. Yo bajé andando y la foto la hice cuando lo hacía. Si no recuerdo mal fui el único que eligió caminar y el resto fueron en el teleférico.
El altar en la cueva Huong Tich
El otro día veíamos La cueva Huong Tich y hoy nos acercamos al zurullo que se veía de lejos y que de cerca resulta ser lo que la gente local adora. Por supuesto, es Asia, así que en vez de robar unos miles de kilos de oro de Sudamérica y hacer una iglesia increíble y preciosa, aquí todo es más pachanguero y tenemos una mesa camilla horrorosa que parece sacada del salón de la mismísima Dolorsi y con eso y unas flores ajadas y cuatro chorradas de incienso ya tenemos el altar montado. Estaba totalmente prohibido hacer fotos allí y no creo que pasara un solo ser humano que no le hiciese fotos al altar.