Distorsiones

  • Inicio
    • Contactar
    • Acerca de
  • Lo imprescindible
    • Visitar Holanda
    • Índice de álbumes de fotos
    • Índice de viajes
    • Recetas de cocina
    • Hembrario
    • El club de las 500
    • Álbum de fotos de bicicletas
    • Álbum de fotos de cervezas
  • Destacados
    • La Arbonaida
    • Comida en fotos
    • Mi herencia
    • uno+cero
    • Visitar Holanda
    • Mis ratos en la cocina
  • Un viaje con trueque de Vueling por Clickair

    17 de septiembre de 2009

    En Mi reencuentro con Vueling camino de Barcelona tienes el relato del viaje de ida

    Mi viaje a Barcelona de dos días tenía un propósito muy específico: Ver el U2 360º Tour. No pretendíamos hacer turismo alguno y por no llevar, ni siquiera arrastré mi cámara de fotos, un accesorio con el que por lo general viajo siempre. El día después del concierto nos volvíamos a casa por la tarde y puesto que nos acostamos tardísimo, habíamos quedado al mediodía. Yo me desperté antes y después de ducharme y vestirme dejé mi habitación en el hotel y salí a desayunar. Era el 1 de julio y comenzaban las rebajas de verano. Pasé por un Zara que no parecía haber notado las rebajas, allí no había una multitud arrancándose la ropa de las manos. De hecho, elegí un pantalón blanco sin más problemas, me lo probé y lo compré. Lo de los pantalones blancos y a ser posible de lino es muy típico de Holanda. Aquí cuando hace calor la gente se viste de blanco y es una de las costumbres locales que se me han pegado. Me gusta ponerme el uniforme nacional y quedar con los amigos en los bares del centro, junto al canal y vernos todos vestidos de blanco como si fuéramos parte de la numerosa prole de Julio Iglesias. Paro aquí o me enredo ?? 

    Tras el pantalón, desayuné en una cafetería y aproveché para buscar una peluquería y cortarme el pelo. Tardé un gran rato en encontrar la zona en la que se encontraban estos establecimientos. Pude elegir entre varios aunque el primero al que acudí la chica me dijo que me podía dar hora para el día siguiente porque tenía todo su tiempo ocupado. Me asombró que en el año de la Gran Crisis a algunos les vaya tan bien. En mi segunda opción tuve más suerte y casi no tuve que esperar para consumar mi traicion. En nueve años de emigrante, hasta ahora siempre había vuelto a cortarme el pelo a la misma peluquería a la que acudo desde hace veintiún años. Mi vínculo con el peluquero es más fuerte que con los amigos que dejé atrás y de hecho, le llevo siempre un regalo por Navidades.

    Tras el corte de pelo pasé por el Fnac y me compré el CD del nuevo disco de BEBE, que había salido publicado esa misma semana. Un día de estos hablaré de la música que compro y que después no escucho, es un fenómeno extraño que achaco a la edad o algún virus extraño que me ha atacado. Para entonces el Turco ya estaba levantado y nos volvimos a encontrar. Dejamos las maletas en la recepción y bajamos andando hasta el Maremagnum para disfrutar del buen tiempo y almorzar por allí. Tras el homenaje teníamos media hora y como el amigo del Turco no había visto nada de la ciudad en los días que había estado allí, cogimos un taxi y le dijimos al hombre que nos llevara a la Sagrada Familia. Lo nuestro fue una visita express, pagamos por ver el lugar en menos de diez minutos.

    Taxi al aeropuerto

    Salimos del lugar tras comprobar el estado de las obras y tomamos un taxi para ir al aeropuerto parando por el hotel para recoger las maletas. El taxista se pasó el viaje hablando con su chati, alguna chica sudamericana que le pedía que pasara a buscarla por la casa para llevarla a algún lado y que no quería aceptar que llevaba clientes. De hecho, le sugirió que la recogiera mientras hacía la carrera y la llevara con nosotros. Todo esto se lo traducía yo a los turcos en inglés que alucinaban en colores y les tuve que recalcar que cuando dicen que Spain is different en realidad es una verdad como un templo y después que entró en plena espiral de decadencia va a peor. Tras su conversación con la novia el hombre se interesó por nosotros y despotricó contra el pesetero de Etoo. Por suerte el aeropuerto no está muy lejos de la ciudad y se quedó con su sermón a medias.

    Una terminal recién inauguradaEncrucijada en la terminal

    Nos bajamos en la nueva terminal que habían inaugurado un par de semanas antes porque el avión de los colegas turcos salía desde allí. Yo tenía algo más de tiempo y los acompañé a facturar. El nuevo edificio es espectacular, con una línea muy agradable y un aspecto demasiado aséptico para mi gusto. Estaba lleno de empleados con chaquetas verde que encauzaban a los despistados viajeros hacia los lugares adecuados. Tras facturar llegaron las despedidas y nos juramos amistad eterna y demás. Yo me marché a tomar la guagua que conecta las terminales y que me dejó frente a la puerta de la terminal 1. Vueling salía de la tres y para llegar a la misma hay que caminar un huevo, llegar al final del aeropuerto, salir a la calle, seguir andando y andando hasta que te aburres por un sitio que parece un polígono industrial y cuando crees que has llegado a la frontera con Francia y has perdido la esperanza encuentras la terminal de bajo costo y cutre-servicios.

    Helarte abstracto

    Creo que ya se han mudado a la terminal de diseño, al menos recuerdo haber leído algo al respecto. Allí, saqué mi tarjeta de embarque usando las máquinas de auto-facturación completamente vacías y viendo una cola tercermundista para realizar la misma tarea si quería asistencia de un ser humano. Hay mucha gente que aún no se ha enterado que en el siglo XXI estas cosas las puedes hacer por tí mismo.

    control de seguridad

    Allí no había nada que hacer así que pasé el control de seguridad y me adentré en la zona restringida a pasajeros. Como documento testimonial dejo esta foto en la que se puede ver todo lo que eché en la bandeja.

    Un avión de clickairInterior del avión

    A continuación vinieron dos horas de tedio esperando el embarque, el cual por supuesto que se retrasó, nos cambiaron de puerta dos veces y para cuando nos llamaron ya íbamos en modo calentito. Aunque había pasarelas vacías a destajo al parecer nuestro avión estaba aparcado en algún lugar lejano y nos subieron en autobuses. Después de recorrer una distancia enorme y casi llegar a la nueva terminal a través de las pistas vimos que nos dirigíamos hacia un avión de Clickair, algo extraño si tenemos en cuenta que volábamos con Vueling. Ambas compañías estaban en esa época inmersas en un proceso de unión/fusión o como queráis llamarlo lo que me hizo suponer que se prestaban aviones, tripulaciones y demás. Para los que no sabían esto fue un poco extraño el ver que nos pedían que montáramos en un avión cuando se supone que debíamos ir en otro.

    Un reposabrazos roto

    Para mí era la primera vez que subía a un avión de Clickair. Recordaréis que el año pasado, al narrar los viajes a Sevilla y Málaga, el director o algo parecido de esa compañía me mandó un correo quejándose por mi desprecio de los mismos al ser propiedad de Iberia e incluso me ofreció un billete gratis para que los probase y pudiese hablar con propiedad. Al final ha sido un año más tarde y en sus últimos días antes de unirse con Vueling y lo que vi no me gustó. Si ya dije que el avión de ida daba mal rollo porque las luces de lectura estaban rotas en una proporción demasiado alta, el avión de Clickair no presentaba mejor aspecto. Para que los que puedan decir que exagero se traguen sus palabras, la imagen anterior muestra el aspecto del reposabrazos del asiento que estaba delante del mío. Había muchas más cosas en mal estado en aquel avión. De la amabilidad del personal de vuelo mejor no hablar, jamás había visto una azafata tan borde en mi vida, se tuvo que meter esa mañana el tampón por el ojete del culo porque tanta mala leche no es normal. Ya antes de despegar se había granjeado el odio de muchos en aquel avión y después conseguiría cuotas de impopularidad alucinantes.

    Avión de Air FranceDesde el avión

    Si tenéis un teléfono móvil de última generación sabréis que es un dispositivo muy sofisticado y que tiene un modo de vuelo que desactiva la antena y hace que puedas usar tu teléfono en vuelo. Esto no se aplica a los aviones de Clickair ya que al parecer están hechos de un material distinto al resto y les afecta enormemente el modo de vuelo de los teléfonos. La azafata obligó a varios pasajeros a dejar de usar sus iPhones y Blackberrys e incluso lo anunció por megafonía y rastreó el avión en múltiples ocasiones buscando gente que no cumpliera su ley para abroncarlos. En lo que va de año he sido pasajero en un montón de compañías y al parecer,los Airbus y Boeing de los otros son de mejor calidad ya que ni están tan estropeados por dentro ni tienen problemas con el modo de vuelo de los teléfonos.

    Hubo otro hecho significativo y que no había vivido anteriormente en un avión. La tipa consiguió calentar tanto a los holandeses que hubo algún tipo de acuerdo entre el pasaje y cuando el avión tomó tierra, justo en el momento en el que terminó la frenada en Schiphol se escucharon un montón de teléfonos al recibir mensajes e indicar que estaban operativos. Quiero que conste que yo no apruebo ese tipo de comportamientos y que por mi propia seguridad preferiría que la gente no juegue con esas cosas. Sobre lo del modo de vuelo, si ya están hablando de permitir a la gente llamar en vuelo resulta cada vez más difícil creer que los aviones no son capaces de soportar esas interferencias. La sargento de cabina recordó que su uso está prohibido hasta que se abran las puertas pero la gente la ninguneó e ignoró y se dedicaron a mandar mensajes, llamar y usar sus aparatos como si aquella totorota estuviera hablando consigo misma. Ahora que he volado con Clickair veo que en su momento hice bien al no elegirlos para ninguno de mis destinos.

    Expendedores de billetes en Schiphol

    Sin equipaje facturado salí del avión y metí el turbo para llegar a mi casa lo antes posible ya que era tarde. En el vestíbulo de Schiphol compré mi billete para el tren en una de las máquinas que hay disponibles y bajé al andén para esperar su llegada.

    El tren para volver a casa

    Iba en el tren de las 21.14 a Utrecht, así que alrededor de las diez menos cuarto estaba en la estación y sobre las diez ya llegaba a mi casa. Fue una pequeña escapada de dos días, intensa y llena de buenos recuerdos tanto del concierto de U2 como de los momentos que pasé con mi amigo el Turco.

  • Catedral de Colonia y río Rin en el club de las 500

    17 de septiembre de 2009
    Catedral de Colonia y río Rin

    Catedral de Colonia y río Rin, originally uploaded by sulaco_rm.

    La ciudad de Colonia está a unas dos horas en tren de mi casa y suelo visitarla al menos una vez al año. Es un lugar genial, sin el agobio de turistas de otros destinos y en donde se puede comer y beber bien a buen precio. Es también el lugar en el que compré mi Canon EOS 50D y la sede de la mayor feria fotográfica de Europa. En octubre del año 2006, en una de las visitas de mis padres nos fuimos allí a pasar un domingo y de ese día surgieron un montón de fotos. Creo que la de hoy, esta Catedral de Colonia y río Rin sobre-expuesta por culpa del sol, es la primera que consigue entrar al Club de las 500.

  • Mi reencuentro con Vueling camino de Barcelona

    16 de septiembre de 2009

    Como estamos en familia, ya sabéis que en el pasado aproveché todos los destinos españoles de Vueling y estuve en Málaga, Sevilla, Madrid, Barcelona y Valencia saliendo desde Amsterdam. Eso fue en la época en la que sus billetes eran asequibles, sus aviones impecables y tenían un aura de buen rollito que se nos pegaba a los pasajeros. Ha llovido un montón desde entonces y el Vueling que me encontré a finales de junio no fue igual. En primer lugar sus precios son igual de caros o más que los de las compañías tradicionales y dependiendo de como viajes pueden resultar hasta más caros ya que has de pagar más por facturar maleta, por elegir asiento y por todo aquello que se les ocurre.

    Como mi amigo el Turco me comentó lo del U2 360º Tour con muy poco tiempo, cuando miré para buscar pasaje, mi primera opción, que era KLM, ya no tenía plazas disponibles. Después busqué a través de Iberia, Vueling, Clickair y de Ryanair volando desde Eindhoven a algún lugar a más de cien kilómetros de Barcelona y que los de Ryanair llaman con toda su jeta Barcelona y se quedan tan anchos. De entre las diferentes posibilidades la que mejor me venía era la de Vueling ya que tanto en la ida como en la vuelta pillaba los aviones en los horarios que me interesaban. Recuerdo cuando viajaba con ellos por menos de cien euros ida y vuelta. Ahora fue una clavada de esas que duelen, sin vaselina para que te entre más suave.

    Todo comenzó con una maleta

    El día que volaba volví a casa después de trabajar, cené y después me marché hacia el aeropuerto. Como siempre, todo comienza tomando un autobús que me lleve a la estación central de Utrecht y por casualidades de la vida, en los paneles de publicidad de la parada aparecían Pe y Almodóvar promocionando su nueva película. No sé, la edad le está sentando fatal a ese director, cada vez me recuerda más al caniche que teníamos en casa hace un montón de años.

    Watertoren en Utrecht

    A medio camino pasamos uno de los puentes que dejan ver una de las múltiples torres de agua que suministran el preciado líquido a las viviendas de la ciudad. Son unas cisternas enormes que se construyeron hace la tira de años y que aún siguen en uso. Hay una ruta turística muy bonita en bicicleta por la ciudad de Utrecht yendo por las diferentes torres de agua y aprendiendo sobre su historia y arquitectura. Por supuesto no es algo que se promocione con los turistas extranjeros, es más bien para el turismo local.

    En el trenAeropuerto de Schiphol

    En la estación, tomé uno de los trenes Intercity que salen cada quince minutos hacia el aeropuerto y que te llevan al mismo en media hora. Era uno de esos de dos plantas y me senté en la superior. Mientras viajaba me entretuve leyendo las revistas y periódicos gratuitos que dan en las estaciones de tren y que son varios. Al llegar al aeropuerto fui directo al control de seguridad y entré en la parte reservada a los viajeros. Vueling, Clickair e Iberia están situados en la terminal conocida como el Más Allá porque se tarda veinte minutos en llegar al lugar. Mientras avanzas y pasan los minutos te entra una sensación extraña, como si estuvieras yendo hacia otro aeropuerto.

    Aviones esperando pasajerosUn vueling

    Por el camino aproveché para hacerle una foto con el móvil a un grupo de aviones de KLM y para cuando llegué a la puerta de salida, allí se empezaban a agrupar los pasajeros. Media hora antes de salir el vuelo comenzaron a anunciar el retraso y cambio de puerta. A la hora a la que deberíamos haber salido no había ningún avión de Vueling enganchado a la pasarela y aún tardó un gran rato en aparecer. Entramos al avión y nos fuimos ubicando en donde nos tocaba. Como casi ninguno estamos dispuestos a pagar por escoger asiento, nos tenían agrupados a todos en la parte delantera del avión y habían huecos en el centro que una vez se cerraron las puertas se llenaron con gente que se cambió de sitio y gracias a eso, el asiento al lado del mío se vació. El piloto anunció que el avión salía con más de una hora de retraso por llegada tardía del vuelo anterior algo que hasta un subnormal podía deducir sin problemas ya que nos pasamos una hora mirando a un espacio vacío frente a la puerta por la que teníamos que embarcar. Con todos sentados comenzó el cachondeo habitual de las operaciones previas al despegue. Las azafatas se veían agotadas, con cara de mala hostia y su alegría y amabilidad brillaba por su ausencia. Una de ellas comenzó a pasar mirando a la gente que estaba leyendo y encendiéndoles la luz superior y al hacerlo descubrimos que un montón de luces de lectura ya no funcionaban. Ella pulsaba el botón y no pasaba nada y seguía de largo, sin preocuparse en absoluto. No era una sola luz estropeada, eran legión. Te da muy mal rollo ver como se descuida el mantenimiento de los aparatos. Es la segunda vez que voy en un avión en el que hay cosas que no funcionan bien. La primera vez fue con Futura Air, en un charter y aquel día aluciné en colores. Alguien llamó a la azafata y le explicó que la luz no se encendía y ella hizo el paripé de tratar de encenderla pulsando el botón unas cuantas veces y optó por decirle que lo notificaría para que lo reparen pero la vimos marcharse a la parte anterior y ponerse a despellejar al prójimo junto con el colega que estaba allí y pasar totalmente.

    El avión despegó y una vez en el aire empezó el zoco ese que montan para tratar de venderte cualquier cosa a precios abusivos y más caros que en cualquier tienda de barriada. Increíble la desvergüenza con la que lo llaman artículos libres de impuestos. Es preferible acudir a una tienda normal y pagar los impuestos y aún así te ahorras de un diez a un veinte por ciento. El vuelo transcurrió sin demasiadas incidencias y a las dos horas llegamos a Barcelona, cerca de la medianoche. En aquella época Vueling usaba la terminal más alejada y cutre del aeropuerto y después de salir y pasar por la misma de puntillas, busqué la parada de taxis y pillé uno que me llevó hasta el hotel en el que me hospedaba y mientras el hombre conducía como un loco y con la radio a todo meter, traté de hablar con mi amigo el Turco para descubrir el lugar en el que estaba y así encontrarme con él después de largar mi maleta en la habitación.

    Nuestro hotel estaba al lado de la plaza de Cataluña y el Turco me esperaba en la Plaza Real así que cerca de la una de la mañana bajé por la Rambla hacia el punto de encuentro. Aluciné en colores. Aquello estaba lleno de putas que te acosaban, insultaban gente y te creaban una sensación de inseguridad increíble. Estuve en Barcelona hace tres años y recuerdo que entonces era una ciudad agradable y en la que te movías tranquilamente tanto de día como de noche y solo te tenías que preocupar por los rateros rumanos que rondaban las paradas de autobús pero es que esta vez la gentuza estaba por todos lados y cuando vi al Turco me comentó que se estaban moviendo en taxi a todos lados para evitar a toda esa chusma que estaba por las calles.

    Nos pasamos la noche de marcha, yendo de local en local, pagando por entrar en alguno de ellos y bebiendo como cosacos ya que al final de lo que se trataba era de divertirnos el par de días que estábamos juntos. Para cuando volvimos al hotel, el sol amenazaba con salir en cualquier momento.

    En Un viaje con trueque de Vueling por Clickair tienes el relato del viaje de vuelta

  • Roque nublo con pino canario en el club de las 500

    16 de septiembre de 2009


    Roque Nublo con Pino Canario en primer plano, originally uploaded by sulaco_rm.

    Después de un montón de años dándole la vara, en junio del 2005 mi amigo el Rubio por fin se decidió a venir conmigo una semana a Gran Canaria junto a su esposa y su hija de ocho meses. Estuvimos en la playa, caminamos por las dunas y por supuesto cruzamos la isla de lado a lado pasando por el centro de Gran Canaria. Llegamos a la zona de Tejeda al mediodía y el sol estaba altísimo y sobrado de luz así que lo mejor que pude conseguir fue esta imagen con demasiada luz pero que tiene su encanto. En ella podemos ver el Roque Nublo y la Rana y de no ser por el pino que está al frente se vería también al Monje. La foto apareció por primera vez en junio del 2005 en la anotación Roque nublo con pino canario y hoy le damos la bienvenida al Club de las 500.

←Página anterior
1 … 2.737 2.738 2.739 2.740 2.741 … 3.622
Página siguiente→
  • Inés en El esquema fenicio – The Phoenician SchemeHola! Año tras año me sigo leyendo todas…
  • huitten en Día 8 – Hulhumale – Shark Tank 3Curioso y simpático lo del tambor. Un ví…
  • Genin en Riff RaffA mi me cabrea que con repartos de 1ª no…
  • Genin en El esquema fenicio – The Phoenician SchemeSi se me pone a tiro, la veo… Salud
  • huitten en Riff RaffSi te gustó, estupendo. Yo, donde hay as…
  • huitten en El esquema fenicio – The Phoenician SchemePues si me puedo reír, la apunto.
  • Genin en Karate Kid: Leyendas – Karate Kid: LegendsPasando… Salud
  • Genin en Tienes un e-mail – You’ve Got MailPues a pesar del 8 no me hace mucho tilí…

Únete a otros 15 suscriptores
Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
  • YO NUNCA – Fui ninguneado
    12/06/2023
  • YO NUNCA – Jiñé a oscuras
    22/05/2023
  • YO NUNCA – Hablé meando
    01/05/2023
  • YO NUNCA – Viví la transición
    10/04/2023
  • YO NUNCA – Conté un secreto de algún colega
    20/03/2023
This website uses cookies
Esta página web usa cookies para recordar tu nombre si comentas. Asumimos que no te importa pero si te molesta, puedes elegir quedar fuera.Aceptar Rechazar Leer más
Privacy & Cookies Policy

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR