Gracias a la festividad del Koninginendag los estrenos de cine de esta semana fueron el martes y así pude ir a cine a ver X-Men Origins: Wolverine antes de marcharme de vacaciones. En España la película se llama Lobezno, supongo que porque ese es el nombre de Wolverine en español. Nos esperábamos encontrar la sala más llena pero al parecer, un martes no es un buen día para los estrenos y conseguimos entrada sin grandes problemas y además logramos una buena posición en el cine.
Un julay que no se corta las uñas sale de marcha y acaba bien jodido y mal pagado
Aunque conocemos lo que ha hecho en los últimos años, los orígenes de Wolverine siempre han sido algo nebulosos y en esta película intentan despejar esas brumas. Al parecer es poco menos que un ser inmortal, que ha caminado entre nosotros durante más de cine años y en ese tiempo ha ido desarrollando su controlada mala hostia y su supuesta misericordia. Lo veremos siendo niño en el día en que descubre sus poderes tras un trágico incidente. Con unos títulos de crédito increíbles veremos parte de su vida junto a su hermano y al final de los mismos hay una escena muy amena en la que atacan un edificio. Ahí se acaba lo bueno. A partir de ese momento Wolverine pretende hacerse pasar por un intelectual de cejas juntas y aburre un poco, pone cara de estar quemándose las neuronas mientras decide si se afeita los pelos de los huevos o se los deja crecer y toda esa bobería lastra un poco la primera hora de película. Quizás la intención era buena pero la realización pudo haber sido mucho mejor. Por suerte salimos del bache y volvemos a la senda de la acción, la violencia y las chorradas más propias de este tipo de película y ya no la volverán a abandonar.
Realmente no creo que necesitáramos conocer la historia de este hombre y la película flaquea cuando lo intentan. Nosotros vamos al cine a ver violencia y las chorradas típicas de estas películas, esperamos una historia de amor más bien ligera y a ser posible sostenida por un metesaca que raramente veremos ya que son para todos los públicos y con algún tipo de moraleja que a los básicos como yo nos resbala y no nos afecta. Si se hubieran ceñido a esto, estaríamos hablando de un peliculón pero esa manía de dotar a los héroes y a los anti-héroes de un sustrato emocional del que carecen a veces falla y jode la historia. Las actuaciones están bien aunque no hay nadie que deslumbre por su soberbia interpretación y ni siquiera recordaré a muchos de los que han tenido un papel en la misma. Los efectos especiales están a la altura de lo que se espera de este cine y es una lástima que algunos de los mejores los pusieran en el trailer ya que no han dejado mucho para las sorpresas que todos creíamos que llegarían a porrillo.
En fin, que está bien, se deja ver y aunque es algo lenta durante un rato, al final tenemos nuestra ración de peleas y muertes y como no podría ser de otra manera, el héroe escapa ya que si no las tres películas de X-Men no tendrían ningún sentido. Avisa a los amigotes, agarra del brazo a la parienta y déjate caer por el cine más cercano a tu casa. Seguro que te diviertes.
