Estoy empezando a pensar que a mi vecino le pagan por acabar conmigo. Los martes llego temprano ya que voy a clases de neerlandés y siempre me lo tropiezo en el jardín. Después de La primera vez ?? yo pensaba que me dejaría recuperarme pero no ha sido así. La semana pasada me convenció para comenzar a remodelar la parte delantera, el pequeño jardincito que hay frente a la casa y que yo quiero eliminar y cubrir de baldosas para que así los gatos vayan a cagar al coño de la puta madre que parió a sus dueños, ya que estoy hasta los huevos que esas bestias miserables y diabólicas me dejen esa zona plagada de mierda. Como al parecer está mal envenenarlos y por allí no puedo pegarles las pedradas que les doy a los que entran por detrás con mi tirachinas, he optado por una solución drástica.
Conmenzamos quitando dos pinos que estaban enfermos, moviendo tres pequeñas matas al jardín trasero y regalando otras cuatro a uno que me las pidió para poner en su jardín. Como lo hicimos a la hora en la que la gente vuelve del trabajo, la gente se acercaba a hablar con nosotros y a darnos órdenes, que todo el mundo lleva un director de proyecto en el interior. Mi vecino y yo ignorábamos sus sabios consejos y seguíamos a lo nuestro. Para cuando acabamos, solo quedaban dos arbustos que teníamos que sacar y eran los peores. Uno lo habían cortado mis padres en octubre pero no habían sacado las raíces y sabíamos que eso sería tela marinera y el otro intuíamos que daría la lata así que también lo dejamos.
En la parte trasera planté dos matas de arándanos azules en la zona de mi parra y el rosal, los cuales podéis ver en la foto siguiente acompañados de unos cuantos tulipanes que por fin han comenzado a aparecer.
Este martes, cuando entraba en mi casa, procurando no hacer ruido, asomó la cabeza, me sonrió y señaló hacia el cuarto de las bicis para que cogiera mi pala, mi sierra, los guantes y fuera con él al otro lado.
El arbusto pequeño lo sacamos en unos veinte minutos pero el otro, aquel que mis padres podaron dejando las raíces atrás, ese nos tomó más de una hora y para cuando habíamos terminado teníamos un cráter en el que se pueden enterrar tranquilamente quince o veinte gatos y no creáis que no he estado tentado de llenar la fosa con esas alimañas. Algunas raíces eran como troncos de gordas y tuvimos que serrar un montón de ellas para poder extraerlo todo. Al final quedó una pila enorme de restos delante de mi ventana para la que ya he concertado una cita con el servicio de recogida de basuras. Mientras trabajábamos pasó por allí el señor que voy a contratar para que cubra todo eso de baldosas y le expliqué el proyecto. Ahora solo me falta elegir las que quiero poner, algo electrificado y con pinchos por si entra un felino para que no lo cuente, similar al nido de alambres que les he dejado en un rincón en el que les gustaba mucho defecar y que parece que ya no les atrae tanto y no sé por qué será.
En esta última imagen tenéis una visión general del trabajo realizado. El pino que está más a la izquierda estaba en otro sitio y lo transplantamos allí. A su lado, sin que se vea desde el punto en el que hice la foto, hay un pequeño arbusto que también transplantamos, después viene el árbol grande y junto a él hay dos matas más que han sido transplantadas desde otros lugares. Esa franja es lo único que quedará de jardín en la parte delantera y está pensada para que no queden huecos en los que algún animal pueda decidir realizar sus necesidades. En caso de haberlos, pondré alguna mata espinosa y aquí paz y en el infierno los hijos de puta de los dueños de esos animales.
Volviendo al jardín de la parte posterior de la casa, una de las franjas designadas para los tulipanes está entrando en su semana de gloria. Algunos de los tulipanes ya se han abierto y el resto calculo que lo harán este viernes. El espectáculo es precioso. Es una selección de tulipanes púrpuras, blancos y rosados y unos amarillos muy esbeltos que siempre son más remolones y aparecen los últimos. En total en esa zona tengo unos cien.
Y ya puestos, acabo esta anotación con uno de los tulipanes púrpura, el primero que floreció este año en mi jardín:
Ya sabéis que todavía estáis a tiempo de pedir un tulipán dedicado. Lo podéis leer en la anotación En abril tulipanes mil ??
