Parece que fue ayer cuando felicitaba la Navidad del 2006 y mira tú que ya ha pasado todo un año. En esta ocasión he optado por repetirme con la foto de las velas tomada en la catedral de Colonia que vimos hace trescientos sesenta y cinco días. Como ya dije, cada una de las llamas que podéis ver es un deseo, una oración, una esperanza que espero se haya cumplido o que se cumpla muy pronto.
Feliz Navidad
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Resulta curioso como por azar algunas fechas relevantes tienden a caer en días de esos que consideramos importantes. Hoy hemos cruzado el umbral del primer millón de páginas servidas en Distorsiones. En realidad son más si recordamos las cien mil que había en el contador anterior pero bueno, lo celebraremos en esta víspera de Navidad y recordaremos este 24 de Diciembre como el día en el que me volví millonario en páginas impresas.
Y ahora a ver si nos esmeramos un poco más y hacemos el segundo millón en menos tiempo 😉
Volvemos a visitar España y le llega el turno a la ciudad de Ávila, una preciosa ciudad rodeada por una muralla medieval completa de estilo románico que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad. Tanto por dentro como por fuera de la muralla hay un montón de iglesias y particularmente llamativo es el Real Monasterio de Santo Tomás, el cual merece una visita si pasas por allí. Llegamos un domingo por la mañana a la hora de la misa. El monasterio fue construido a finales del siglo XV y tiene tres claustros a cual más espectacular.
Dentro del monasterio hay un palacio que mandaron a construir los Reyes Católicos y que han reconvertido en la actualidad en museo de arte oriental.
Este está resultando un año de ensueño para el cine de Fantasía. Hemos tenido varias películas que merecen un puesto de honor y parece que seguimos en racha porque Enchanted es un peliculón que no hay que perderse. En España la han llamado Encantada. La historia de Giselle y está en cartelera en estas navidades del 2007.
Una julay post-metrosexualizada se va a la Gran Manzana y le endiñan un gusano
Cambiando de tema durante unos instantes, una de las cosas que me gustan del juego de PS2 «Kingdom Hearts» y de su segunda parte es que están basados en películas que todos conocemos y adoramos y cambian la historia un pelín para que el jugador sea partícipe de las mismas y cómplice de todos esos momentos que vivimos de niños o no tan niños. Exactamente eso mismo pasa con Enchanted, una historia en la que volvemos a caminar por los fácilmente reconocibles cuentos de princesas y brujas, esas viejas películas de la Walt Disney en las que todos cantaban, los animales hablaban y la bruja es mala-malísima y lo cambian en el instante en el que la princesa es enviada a nuestro mundo y acaba en Nueva York, en el mundo «real«, rodeada de seres humanos y fuera de su entorno de animales maravillosos y amor verdadero. A partir de aquí conocerá a un hombre que la ayudará y que no dejará de sorprenderse con sus salidas tan extrañas e intentará incluso cantar en nuestro mundo como lo hace en el suyo. Volvemos a visitar varias películas y en todo momento las cosas nos resultan vagamente conocidas pero es no le roba ni un gramo de interés a la película, que te hace pasar dos horas de puro entretenimiento en el que te ríes, te emocionas, se te mueve el pie con la música y casi que te lanzas a cantar. Esto es espectáculo, es cine de ese que todos adoramos y que negamos por vergüenza y porque no está bien que uno lo diga. No hay nada intelectual, no hay movimientos de cámara sofisticados ni una fotografía que te pone el vello de punta. Solo hay una buenísima película para pasar el rato y a la que puedes ir con tus amigos sabiendo que a todo el mundo le gustará por igual.
No dejes pasar esta perfecta película para las navidades.
