Desde la calle, perdido en el laberinto de callejones que configura la ciudad de Lucca, andas casi siempre medio a oscuras y cuando miras hacia arriba, la luz malamente puede pasar porque las casas la ocultan. En esa ciudad, tener un rayo de sol entrando por la ventana es básicamente un milagro. Tiene que resultar algo deprimente vivir en uno de los pisos más bajos y también está meridianamente claro que cualquier culocoche que viva por allí lo ha de pasar fatal. Mirando el lado positivo, cuando el vecino de enfrente echa un kiki, te haces unas cotufas y disfrutas del espectáculo en palco de puro lujo.
3 respuestas a “Callejones estrechos casi sin luz en Lucca”
Pues el espectáculo puede merecer la pena, pero no se yo si compensará esa falta de luz… 🙁
Salud
Si tengo que vivir en un zulo de esos, me vengo abajo.
No me termina de convencer, eso sí, al menos por esas calles pocos electrodomésticos tipo tanque con ruedas habrá, lo que no deja de ser una ventaja. 😉