También en la Rua de Santa Catarina está la Capela das Almas, con su fachada completamente cubierta de azulejos. La capilla original era de madera, hasta que en el siglo XVIII (equis-uve-palito-palito-palito) hicieron la capilla actual. Los azulejos son de 1929 y hay más de quince mil. Por las fechas, esto coincide con el auge del primo hermano del PoZero que seguro que sacó tajada. Tengo clarísimo que la capilla ganó un montón con los azulejos, dejó de ser un edificio corriente para convertirse en una obra de arte.