El día que buceamos en las islas Similan, Koh Bon y Koh Tachai


En realidad si quieres leer esta serie desde el comienzo, tendrás que saltar a Regresando al viaje a Asia para ver las fotos y avanzar desde allí y por si la cosa no es complicada, esta saga de fotos y vídeos está relacionada con el relato que comenzó en Desde Utrecht a Kuala Lumpur y si estás confundido, pues que sepas que así es la vida

Continuamos con el festival submarino y por ahora, llegamos al tercer día en el barco y segundo en el que buceábamos. El relato de aquel día está en Buceando en las islas Similan, Koh Bon y Koh Tachai y comenzamos con una foto de la cubierta superior del MV Sawasdee Fasai, el barco en el que viajábamos y que pese a los rumores malintencionados de los comentaristas del mejor blog sin premios en castellano, era fabuloso. Como todos los que iban conmigo eran asiáticos, la zona de tomar el sol era prácticamente mía durante el día, salvo por la parte que se ve a la sombra en la parte de popa y en la que se ponían los fumadores:

La cubierta superior del barco

Mirando hacia el otro lado, teníamos la proa del barco y debajo de mi, la sala en la que iba el chófer, el puente de mando o como lo queráis llamar y en el que casualmente, había dos camarotes y en uno de ellos, el de la derecha (en la foto), me quedé yo. En la época en la que yo hice el viaje, al final de la temporada, este barco era el más fastuoso y en el resto de la temporada, también. Los europeos y gringos tienden a elegir los más baratos, que son como barcazas petadas de gente, mientras que el nuestro era todo espacios amplios y no había sensación alguna de claustrofobia, pero claro, pagabas por lo menos cien leuros más:

La proa del Sawasdee Fasai

Ese tercer día estuvimos buceando en tres lugares distintos y la foto de la isla corresponde a Koh Bon, el punto intermedio. Todas las islas que pasamos estaban desiertas, salvo por excursiones que venían a pasar el día pero que mayormente se quedan en los barcos o en alguna playa que tengan.

Junto a Koh Bon

Finalmente, la última foto es del momento más importante del día para mi, la CENA. Yo competía por ser el primero o el segundo en la cola cuando ponían la comida y comenzaba el bufet. El desayuno estaba chulo pero la cena era fabulosa:

Papeando en el barco

La parte más interesante de todo es el vídeo con el resumen de ese día. Comenzamos pasando por debajo de un arco en una experiencia asombrosa a la par que fabulosa y esplendorosa. Después pasamos entre pedrolos enormes, que el lugar parecía que se prestaba a unas piedras gigantescas. Alrededor del segundo minuto y veintidós segundos, podemos ver algo estremecedor. Otro grupo bucea por el fondo, por debajo de nosotros, y la que va en la cola del grupo es una de las dos chinas que que semperifollaban para bucear. En este caso, lleva unos calcetines blancos enormes, traje en plan minifalda de pelandusca o algo así. Las dos chinas se pasaban el tiempo debajo del agua haciéndose fotos a ellas mismas para su impacto social. Un poco después de esto vemos un mero gigantesco que no pude pillar para que mi madre se lo jinque. Seguimos con bandas gigantescas de unos peces amarillos que no se lo que son, pero que seguro que no se comen y al final tenemos otra escena que parece sacada de un acuario con un grupo de peces. El día fue fantástico. La música que acompaña a las imágenes es la canción Frozen de la reina del Pop Madonna. El vídeo, si no lo veis debajo de este párrafo, está AQUÍ:

El relato continúa en El día que buceé con un tiburón ballena y muchísimo más


5 respuestas a “El día que buceamos en las islas Similan, Koh Bon y Koh Tachai”