Con la de películas que se ruedan simultáneamente en Nueva York, lo raro es no tropezarte con algún famoso. Cuando estuve en la ciudad a finales de mayo del año pasado con mis padres, fuimos uno de los días a presentarle nuestros respetos a la Estatua de la Libertad y al regresar vimos un pequeño revuelo en un rincón Battery Park y nos acercamos a noveleriar. Eran un pequeño grupo y estaban rodando una escena en la que un vendedor de helados atendía a una chica. Nuestra sorpresa fue mayúscula al ver, a menos de diez metros de nosotros, al maestro, al único, al inigualable Woody Allen. Flipé en colores. Creo que me ha gustado su cine básicamente desde siempre.
Actualización: Gracias a ale sabemos que el hombre que está al lado del Genio es Larry David.
Me llamo la atención lo desapercibidos que transcurren los rodajes en esa ciudad y la poca atención que le presta la gente. Los que mirábamos debíamos ser menos de diez personas y todos éramos turistas. A los nativos se la traía al fresco y después de echar un vistazo seguían su camino mientras nosotros babeábamos allí y mirábamos al maestro intentando decodificar los gestos mientras hablaba por teléfono. Si este hombre intenta rodar en cualquier ciudad Holandes, estoy convencido que necesitarían medio ejército para contener a la muchedumbre de curiosos que abarrotaríamos el lugar hasta una hora después de que se marchen ellos. Y en España imagino que sería lo mismo.
Buscando información he descubierto que la película para la que rodaban esta pequeña escena se llama Whatever Works y se estrenará durante el 2009. Me muero de ganas por verla y descubrir si la escena que vi rodarse ha sobrevivido a la mesa de edición y de ser así, saber estaba allí, fuera de plano pero a unos escasos metros.