
Aunque sé a ciencia cierta que vi la película original, no estoy tan seguro de haber visto las secuelas que hicieron, aunque sí recuerdo que hace quince años vi The Karate Kid y me pareció flojilla y puedo confirmar y confirmo que no sigo ninguna serie sobre el tema, que al parecer las hay. Con cierto recelo fui al cine a ver Karate Kid: Leyendas y al parecer no llega a España hasta agosto, con lo que toca agarrarse los machos y esperar para poder deleitarse con Karate Kid: Leyendas, que en tantos meses igual deciden cambiar el título y llamarla truscoluña no es nación.
Un julay k-bezudo se lía a hostias con otro panoli de barriada periférica.
Resulta que el chino Kudeiro está deprimido o algo así porque al hermano lo mataron de una paliza y la madre lo obliga a emigrar a Nueva York y allí se encoña de la vecina y se encariña del papuchi de la susodicha e intenta ayudarlos a arrejuntar dinero para pagar deudas con un criminal o algo así y cuando el plan falla tiene que entrar en una competición de karate o similar que gana siempre un panoli que resultó ser el ex de la vecina de la que está encoñado y para preparalo, su entrenador chino le pide ayuda al panoli de la película original o algo así y todos gimen que no veas y dan golpes al aire pero esta vez no limpian ventanas y claro, al fnal gana el bueno y todo el mundo se emociona hasta las lágrimas.
Siendo como no soy seguidor de la serie telelevisiva o super-fans de las pelis originales, para mí lo cierto es que se pegan como cuarenta minutos al comienzo de la peli en los que pasa muy poco y de repente, se olvidan de todo eso, juntan a los dos maestros de artes marciales, uno con Karate y el otro con Kung-fu y la película cambia a otra en la que hay una pelea, que por supuesto vemos a cámara lenta y estirándola, estirándola, estirándola para que todos podamos apreciar hasta el milisegundo la belleza de estas artes marciales. El resultado es que la historia flaquea, tiene unos agujeros enormes y el protagonista carece de carisma y los viejunos que trajeron, tanto de la peli original como de la de hace quince años, tienen papeles mediocres y pequeños que no funcionan porque en ningún momento se trataba de hacer una peli con ellos. El pasado, fuera el que fuese, está olvidado y vivimos en el presente del cabezudo chino que en una semana recibe un curso intensivo de artes marciales en una azotea y gana una competición, o algo así y todos se emocionan hasta las lágrimas celebrando tremendo éxito.
Por la forma en la que escribieron y ejecutaron el guion de la peli, es muy simplona y teniendo siempre presente las graves carencias intelectuales de los miembros del Clan de los Orcos, que igual responden bien a esto. Puede provocar daños cerebrales severos a los sub-intelectuales con GafaPasta. No creo que merezca la pena ni verla en la tele, salvo que tengas insomnio y necesites algo para noquearte.

2 respuestas a “Karate Kid: Leyendas – Karate Kid: Legends”
Una pena, porque la primera y única que he visto (que fue la originalísima) me gustó mucho.
Pasando…
Salud