Aldaba en la fachada del palacio de Carlos V


Casi todos los días se aprende algo nuevo, al menos en mi caso, aunque la verdad que ayuda mucho ser un cacho de carne ignorante con ojos como yo para estas cosas. Cuando estaba poniendo nombre a las imágenes que seleccioné para este pequeño (es un decir, al final siempre me apaño para poner demasiadas fotos) paseo, pedí ayuda a Landahlauts y él me corrigió mi «Fachada del palacio de Carlos V» añadiendo lo de la aldaba. Yo que soy de natural más bien ignorantón le dije que aquello no era una puerta, es un pedazo de muro del copón y hasta donde mi reducido intelecto abarca, una aldaba es un objeto metálico que se pone en las puertas para llamar golpeando en las mismas. Landahlauts me corrigió y me dijo que también se usaban para fijarlas en las paredes y atar en ellas los caballos. En menos tiempo del que tarda Hermione en decir «Petrificus Totalis» salté al RAE para rebatírselo con la palabra de nuestros sabios en la mano pero me tuve que joder porque tenía toda la razón del mundo y su segundo significado es el de «Pieza, ordinariamente de hierro y de varias hechuras, fija en la pared para atar de ella una caballería«, así que los ornamentos exteriores del Palacio de Carlos V, mal que me pese, son unas aldabas para caballos de gigantes muy chulas.

Dicho esto, si alguien se cree que me agaché para hacer la foto, que sepa que está muy equivocado. De hecho, tuve que levantar la cámara ya que están muy elevadas y son enormes. El milagro está en que sigan allí, que en España lo de robar metales tiene mucha tradición y cada una de estas piezas debe valer una pasta.


3 respuestas a “Aldaba en la fachada del palacio de Carlos V”

  1. Yo siempre que escucho la palabra aldaba me acuerdo de la peli El jovencito Frankenstein, cuando el tío dice mirando la puerta Vaya par de aldabas y la mujer, creyéndose que se refiere a sus tetas dice Gracias. Me encanta, es una palabra que siempre que la escucho o leo sonrío.