Chamo cruzando la calle en una ligfiets


En una de mis últimas visitas a Amsterdam me crucé con el chamo de la foto y básicamente, lo seguí y crucé la calle antes que él para poder hacer la foto de frente, que en raras ocasiones se me pone a tiro una ligfiets con su ciclista a poca velocidad. Esto sucedió en Leidseplein, mientras paseaba esperando que empezara la película que iba a ver. Desconozco la marca de la ligfiets, pero esta es del tipo triciclo, con lo que cuando se para el pavo no tiene que preocuparse de sacar la pata para mantener el equilibrio. Vemos que no hay volante y que se maneja usando dos barras laterales, con lo que las manos están siempre ocupadas y esto excluye el uso de las chamas adictas al CaraCuloLibro o el Güasá, que no podrían estar ahí sin la posibilidad de usar sus telefoninos. También vemos que lleva dos bolsas de carga y una vara con una banderita por arriba para indicar que está por ahí y que los coches no lo maten, aunque es muy probable que un día acabe bajo un coche porque no lo verán. Esta no tenía pinta de ser eléctrica, pero supongo que el precio estará por encima de los tres mil leuros. Se puede ver la diferencia en la posición del ciclista mirando al chamo que viene por detrás y que está muchísimo más alto.


4 respuestas a “Chamo cruzando la calle en una ligfiets”

  1. Lo que te mola es que es casi como ser culocochista pero con pedales.
    A propósito, el edificio que se ve detrás, por la izquierda, es la tienda de la manzana mordida de Ámsterdam, que si Virtuditas visita la ciudad, esa es una de las atracciones que no se puede perder que todos sabemos de qué patas cojea …

  2. Para mi economía, la manzana mordida está totalmente fuera de mis posibilidades, así que ni figura en mi lista de proveedores, en cuanto a la bici, no, yo ya requiero asientos y posturas mas adecuados a la delicadeza de mis carnes de ancestral… 🙂
    Salud