Una de las cosas que más me molesta es la diferencia en las fechas de estreno entre España y los Países Bajos. Me vuelve loco porque o llego muy tarde a algunas películas o las veo meses antes de que aparezcan en España y las aparco y para cuando quiero hablar de ellas ya ni me acuerdo. Por suerte hoy no sucede nada de eso porque la película que quiero comentar me gustó un montón y me dejó un buen recuerdo pero con los pallufos es otro cantar. Se trata de The Heat, película que se estrena en España a finales de octubre con el fastuoso título de Cuerpos especiales que por supuesto no tiene nada que ver con el original y que supongo que es por la mente calenturienta y sexista del distribuidor, al que le deben poner las señoras maduras y las gordas.

Dos bebas julays se ven obligadas a trabajar juntas y se tienen una tirria que no veas

Una agente del FBI más ambiciosa que un yerno real y que quiere llegar muy alto ha de trabajar en un caso con una policía que es poco menos que un desecho humano y que carece de modales. Desde el primer instante se odian a muerte pero ya se sabe que el roce hace el cariño y conforme pasan tiempo juntas descubrirán que no son tan diferentes como se creían.

Esto es como Arma Letal pero con almejas en lugar de salchichitas. Las dos chamas han dejado atrás sus mejores años y mientras una está llegando al preámbulo del ocaso más o menos en forma, la otra es como una morsa enorme y maleducada. La película tiene un arsenal de situaciones cómicas que funcionan muy bien y consiguen lo que se proponían, que es hacernos reír. La química entre Melissa McCarthy y Sandra Bullock es perfecta y ambas te recuerdan a esas parejas que llevan toda una vida juntos y se toleran pero desde el odio más profundo. La película tiene alguna que otra escena de acción muy bien hecha y en la que seguro que son los extras los que se lucen pero todo envuelto en comedia, no dejando que paremos de reír hasta que llegan los títulos de crédito. Por suerte eligieron hacer una comedia para adultos y las dos son groseras, zafias y vulgares a la hora de soltar barbaridades, algo que un ser tan básico como este servidor sabe apreciar. Es la típica historia veraniega, cine directo, sin complicadas tramas secundarias y que no pretende asombrarte por las fabulosas interpretaciones de sus protagonistas.

Esta es la excusa perfecta para convocar al Clan de los Orcos al completo, incluyendo las pavas. Seguro que las carcajadas llegan hasta a la capa más exterior de la atmósfera y las hembras apreciarán que las saquéis a que les de un poco el aire. No tengo tan claro que un sub-intelectual con GafaPasta tenga estómago para un humor que busca golpear directamente en el estómago pero igual hasta me equivoco.