Una prueba de máxima dificultad y que no todo el mundo supera es la de visitar los mercados en Asia y era particularmente difícil en Vietnam. Los mercados son lugares petados de gente, en el que te mueves lo mejor que puedes y en el que los olores son intensos. La foto la hice en la zona de las verduras en donde el olor es aceptable pero cuando llegas a la carne o el pescado, el choque de olores en tu nariz es brutal y hay gente que sale por patas. Tampoco ayuda el despliegue de animales muertos y despiezados que hay por allí y que nos recuerdan que nosotros nos hemos ablandado y somos más de bandeja de carne ya procesada en el supermercado pero en otros sitios se llevan hasta la cabeza o las pezuñas del bicho.