Otra maravilla de edificio en la calle Dale y que ahora también es un hotel, en un edificio restaurado y espectacular del siglo XIX (equis-palito-equis). El edificio se construyó en una mezcla de estilos renacimiento italiano y francés. Cuando yo lo vi todavía no había abierto el hotel, que la ciudad lo vendió más o menos en aquella época y después lo han hiper-mega restaurado, metiéndole hasta una piscina en el interior. El hotel abrió sus puertas este año. Quitas los coches y las señales de tráfico y esta calle parece sacada de otras épocas.