
La historia de este templo es bastante curiosa. Cuando el rey de aquella barriada periférica murió se montó una reyerta entre sus dos hijos mayores y básicamente se mataron entre ellos, quedando como nuevo rey el tercero de los hijos. En el lugar en el que se mataron sus hermanos y seguramente para agradecerles el favor, el nuevo rey construyó el templo. El Prang es uno de los más bonitos que he visto. Está muy decorado.
Le tocó el gordo sin jugar… 🙂
Salud