El repudio


Si de cuando en cuando curioseas por los intríngulis del RAE, sabrás que una bonita manera de referirse a la renuncia es usando el substantivo repudio. Después de mil pasos y dos mil documentos hoy llegó el día en el que me tenía que acercar al consulado para finiquitar mi relación con la marca España. Allí devolví el pasaporte que pese a pagar, pertenece al Estado, devolví el Documento Nacional de Identidad, firmé un montón de papeles que afirman mi voluntad de no ser españó y ahora toca esperar … unos meses …. hasta que en el Registro Civil de Las Palmas hagan lo que tienen que hacer y lo envíen al Consulado de Españislavia en Amsterdam y ellos me lo reenvíen a mí. El proceso en sí es impersonal y aburrido. Yo lo habría hecho con los funcionarios vestidos con miriñaques y ropitas de época, con sus pelucones postizos y hablando en castellano antiguo o mejor aún, en latín. Además, por un módico suplemento, podían incluir a un presunto tocador de niños, uno de los cuervos negros de nuestra secta favorita y que te hiciera unos tocamientos in situ mientras rezaba dos padres vuestros y tres ave maría impurísima y te echaba unos exorcismos de esos como en las pelis, quizás con unas cuantas velas negras para darle más dramatismo al momento. La realidad en este caso no estuvo a la altura del momento.

Aparte del hito que supone devolver un pasaporte, lo más interesante es que la Dolorsi estuvo en la capital de los Países Bajos por primera vez (que yo recuerde). Fue en tren a Amsterdam, pedaleó junto al canal Amstel y durante una media hora estuvo aparcada en la calle, en el Weteringcircuit, aunque por suerte estaba del lado de las oficinas en las que yo estaba y pude tener un ojo fijo en ella todo el tiempo, que la pobre es un botín muy delicioso para los mangantes de bicicletas. Después fuimos juntos a otra estación, Duivendrecht, desde donde seguimos camino a Hilversum.


10 respuestas a “El repudio”

  1. Seguro que es mas fácil dejar de ser español que que te den de baja en la Iglesia de tocadores de niños…
    Salud

  2. De la secta no se sale. Me lo han dejado bien claro. Por desgracia, me marcaron prácticamente al nacer y ahora tengo que decir sin orgullo que pertenezco al grupo ese que basa la existencia de un falso Dios en un adúltera que pecó follando con otro porque su marido era marico y después se inventó una supuesta superioridad de su hijo.

  3. Vaya hombre, has dejado de ser un macho ibérico para convertirte en una florecilla holandesa. Ya no perteneces a la estirpe de una raza de conquistadores que llegaron a dominar el mundo. ¿Y ahora qué? Con lo que mola ser españó. Nada tío, has hecho bien, es como si hubieses subido en ascensor a una planta superior en la World Wide Enterprise.

    Por otro lado, en su día pude observar que la Dolorsi era una Dahon y, que sin ser una mala bicicleta, no puedo entender que un tipo como tú que siempre hace alarde de sus dispositivos marabiyosos no disfrute de una Brompton de color verde inglés. Eso si, siempre esposada a uno de tus brazos para que no te la roben.

  4. Doverinto, habiendo nacido en las colonias ultraperiféricas, lo de macho ibérico nunca se ha podido usar en referencia a un servidor. Holanda también tuvo su Emporio y ahora somos más molones con reina Argentina y tó.

    La Dolorsi me ha durado la tira de años sin ser de pedigrí y cuando la he dejado en la calle, no despierta el interés de los levantadores de lo ajeno. Las Brompton son muy cantosas y apetecibles.

  5. Si estás interesado en salir de la secta, infórmate, yo conozco a uno que apostató, tuvo bastante paciencia haciendo los trámites y lo logró.
    A mi me da mucha pereza, y total pá qué…
    Salud

  6. Genín, sigues todos los pasos, te gastas dinero y al final no te borran, se limitan a poner una marca junto a tu nombre en el lugar en el que te tienen registrado y te siguen considerando uno de los suyos.

    Yo quiero mi nombre totalmente borrado, quiero que en sus archivos no produzca ningún resultado. Si es necesario, quiero una ceremonia de expulsión pública con tocadores de niños vestidos con sus faldas echándome agua supuestamente bendita (salida de las manos de un tipo que seguramente es pedófilo).

    He conseguido borrar mi nombre de todos lados salvo de ese club.

  7. Lo de borrarse de Españislavia es de esas cosas que dan ganas de hacer cada día que pasa. Respecto a la secta… si alguien descubre la forma de darse de baja a todos los efectos que avise… jaja

  8. Pues a mí me da pena que te hayas borrado, mira tú por dónde, aunque ganas no nos faltan a los demás.

  9. ¿A que te quedaste una fotocopia de todos los documentos españoles?…¿A que sí?… Con lo que te gusta la historia, esos documentos forman parte de la tuya.

  10. Del pasaporte nuevo no tengo y de hecho, cuando me lo quitaron y lo pisotearon y lo mearon me di cuenta que debería haber hecho copias de la página con el visado de Indonesia. De todas las páginas del pasaporte que usé hasta diciembre sí que tengo.