El salón más espectacular dentro del ayuntamiento de Estocolmo es el Salón Dorado, de unos cuarenta y cuatro metros de largo y con sus paredes decoradas con mosaicos dorados. En este salón se hace el bailoteo del banquete de los premiados con los Nobel. Los mosaicos se pusieron gracias a una donación anónima, definitvamente, de alguien que no pertenecía a la FIFA porque esos no sueltan, solo trincan. Los mosaicos representan motivos de la historia sueca y hay algún pallufo, como que la cabeza de un santo montado a caballo no aparece porque la cagaron con el tamaño.
Una respuesta a “Gyllene Salen en el ayuntamiento de Estocolmo”
Y bien dorado que es, muy bien puesto el nombre 🙂
Salud