Infierno blanco – The Grey


Hace algo más de un mes fui a ver la película de la que quiero hablar hoy. En realidad, estuve como tres semanas intentando ir a verla, no terminaba de cuajar según los horarios en los que la ponían y mis visitas a Amsterdam. Además, no la daban en todos los multicines de la cadena para la que tengo el pase ilimitado y eso complicaba la cosa. Finalmente cuajó y tengo que reconocer que salí del cine muy contento y que me lo pasé muy bien, que es de lo que se trata. La película se llama The Grey y en España se estrenó en febrero con el título de Infierno blanco

Un grupo de julays van jodidos cuando se escoña el avión en el que viajaban y se ven en medio de Alaska rodeados por un montón de lobos que no están contentos con esta invasión de su keli

Unos trabajadores de una refinería en algún lugar perdido de Alaska vuelven al mundo conocido en avión cuando el trasto sufre un accidente y se estampa en el medio de la nada. Los pocos que sobreviven han de luchar contra un entorno realmente inhóspito y contra una manada de lobos que los recibe como agua de mayo y que se los quiere comer y así matar el hambre. El grupo lo lidera un hombre que trabaja como cazador y que tendrá que lidiar con la naturaleza animal y con la humana.

Esta debería llamarse la película de Liam Neeson porque el hombre es como un imán del que no podemos apartar la mirada cuando aparece en pantalla. No me viene a la cabeza ningún otro actor que podría haber hecho esto y hacer que el resultado sea un producto bastante decente, entretenido y con unas dosis de tensión como las que tiene en esta historia. La trama es fascinante y está claro que nos podría pasar a todos los que volamos, solo que en mi caso, si cae el avión en Alaska y sobrevivo, es más que probable que muera temblando como un pajarito en las siguientes dos horas y tratando de mantener la dignidad y tener un final a lo Leonardo DiCaprio en Titanic. La película tiene un fuerte componente de cine de terror por los lobos pero en realidad no buscan ese lado y los ataques de los animales, aparte de crueles y sanguinarios, no son para darnos sustos y hacer que nos encojamos en nuestras butacas, aunque quizás por eso lo hacemos.

Recapitulando, una peli de acción muy buena, con dosis masivas de adrenalina, un tema que nos toca un poquito y un actor como la copa de un pino. Hasta un orco del Clan de los susodichos la puede disfrutar y cualquiera que se lo pase bien con el cine de acción debería tenerla en su lista de cosillas a ver.


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