Si te pones a pescar en alguno de los innumerables canales que cuadriculan los Países Bajos igual te llevas una sorpresa y te encuentras con un pescado tan extraño como el de la foto. Bicicletas robadas, rotas o simplemente las ganas de hacer una gamberrada de algún grupo de jóvenes pueden hacer que una bicicleta acabe bajo las aguas de un canal y viva en ese entorno durante años y años hasta que la encuentren.
Al salir a la superficie igual tiene un aspecto como la que podemos ver hoy.
En el Álbum de fotos de bicicletas encontrarás un montón de bicis que he ido fotografiando a lo largo de los años
Una respuesta a “La bicicleta que vivió dentro de un canal”
Con tanta alga, seguro que la pintura se encuentra en impecable estado. Me ha hecho mucha gracia la foto.