Distorsiones

  • Inicio
    • Contactar
    • Acerca de
  • Lo imprescindible
    • Visitar Holanda
    • Índice de álbumes de fotos
    • Índice de viajes
    • Recetas de cocina
    • Hembrario
    • El club de las 500
    • Álbum de fotos de bicicletas
    • Álbum de fotos de cervezas
  • Destacados
    • La Arbonaida
    • Comida en fotos
    • Mi herencia
    • uno+cero
    • Visitar Holanda
    • Mis ratos en la cocina
  • Guraidhoo Corner 1, décimo día

    22 de diciembre de 2023

    Entramos en el décimo día de buceo en las Maldivas en Guraidhoo y en esta primera inmersión del día fuimos a Guraidhoo Corner, que con algo de corriente es espectacular y seguimos con inmersiones épicas. La música sigue siendo de John Williams, la canción Marion’s Theme del clásico En busca del arca perdida – Raiders of the Lost Ark

    Lo primero es llegar a la esquina de Guraidhoo y una vez allí, anclarnos para el espectáculo. Comenzamos avanzando hacia el lugar y por encima de nosotros vemos un águla marina y un tiburón gris, que son mucho más grandes que los de punta de aleta blanca o negra. Sobre el minuto y medio tenemos el águila marina que parece volar tranquilamente en el lugar y mirando hacia atrás vemos que viene un tiburón algo más bajo. Pasado el segundo minuto tenemos un águila marina muy cerca de nosotros. Esos animales son bellísimos, con todos esos lunares por encima. Fue como si acercara a saludarnos. A lo lejos un tiburón de punta de aleta blanca. Y siempre, una barbaridad de peces nadando entre ellos.

  • Un nuevo regreso a África

    21 de diciembre de 2023

    Desde el sábado de la semana pasada estoy en Gran Canaria, en África, que cada vez lo parece más por la invasión que han permitido suciolistas y podemitas, que han hecho que zonas de la ciudad de las Palmas de Gran Canaria que antes eran seguras, ya no lo son, con bandas de criminales marroquís siguiendo y atacando a la gente, todo ello permitido y promovido por suciolistas y podemitas, que ellos viven en barriadas de lujo y a ellos no les afecta. Mi viaje lo organicé aprovechando que los sábados Transavia tiene dos vuelos, uno a horas intempestivas y otro por la tarde, que es el que yo prefiero porque así puedo ir al aeropuerto durante la mañana muy relajado.

    Me levanté, desayuné y después, revisé mi maleta de nuevo, intentando buscar las cosas que siempre acabo olvidando y recorrí mi casa de punta a punta desenchufándolo todo, puse los programadores en la luz del jardín y otra dentro de la casa y también reprogramé la calefacción para que mantenga la casa a unos fresquitos nueve grados. A la hora prevista, salí de mi casa y les dejé a mis vecinos los güevos frescos que me quedaban que si se quedan en mi nevera, para cuando haya regresado a los Países Bajos ya tendría parrulos.

    El primer tramo lo hice en guagua, a la estación de Utrecht Centraal. Es flipante como el transporte público neerlandés ha sido empotrado en el programa de mapas de GooglEVIL y puedes ver en dónde está la guagua y cuanto le falta a tu parada. La susodicha me dejó en la estación, en donde me subí al tren para ir al aeropuerto, que llevan varias semanas en obras en los alrededores del aeropuerto y hay menos trenes directos. Fue exáctamente media hora de viaje hasta llegar allí y como ya me conozco la rutina, subí a salidas para facturar la maleta, algo que tienes que hacer tú mismo, que lo de las colas aquellas esperando que alguien lo haga ya son historia en la terminal de facturación de KLM y Transavia y el sistema demuestra, que igual que el manejo de las cajas del super, era un oficio que tenía mucha leyenda pero hasta alguien que nunca antes lo ha hecho tarda unos segundos en aprender sin curso alguno.

    Tras despedir a mi maleta, me dirigí a pasar el control de inseguridad, en el que la cola era de cinco a diez minutos, Con los maquinares que tienen, no hay que sacar nada de dentro del equipaje de mano y también les da igual las cantidades de líquidos. Superado el control, tenía unas dos horas y me fui directo a mi puerta de embarque para esperar. Transavia es una compañía que cree en el caos más absoluto y sus embarques son muy rápidos, yo diría que más rápidos que los de esas empresas que crean dieciocho grupos y medio. En el avión tenía ventana y aunque inicialmente no había nadie sentado a mi lado, más tarde, en el asiento del pasillo, se puso un friki que intentaba mirar por la ventana cuando yo había bajado la persiana, que igual era ciego porque no se veía nada. El despegue fue híper-mega rápido. Fue arrancar el piloto y yo creo que en poco más de un minuto estábamos en la pista de despegue acelerando, de hecho, el vídeo, que solo algún Dios sabe cuando lo veremos, dura tres minutos si no lo acelero.

    Creo que me dormí como una hora y el resto del tiempo lo pasé viendo episodios de mis series favoritas. El aterrizaje tampoco tuvo incidencia alguna y llegamos a Gran Canaria en hora, aunque como tenía maleta facturada, tuve que esperar un rato hasta que salió la mía y después subir a la parada de guaguas para pillar la que me llevó a la ciudad. Pese a que todo salió bien, si sumas todas las horas, el desplazamiento desde mi barrio en Utrecht hasta la keli de mi madre en las Palmas de Gran Canaria viene tomando diez horas, de las que media hora es el tren, cuatro horas y quince minutos volando y entre medias, hay muchas esperas.

    Estaré por aquí debajo, trabajando y de vacaciones, hasta casi el final de la segunda semana de enero.

  • Kandooma Thila 3, noveno día

    20 de diciembre de 2023

    Llegamos a la tercera y última parte de mi inmersión en Kandooma Thila y aquí, además de los tiburones, tenemos los bancos de peces que nos cruzamos cuando volvíamos a la superficie, que es que fue absolutamente épico y legendario. La música es la famosísima canción Flying Theme compuesto por John Williams para la película E.T. El extraterrestre – E.T. the Extra-Terrestrial y que si no reconoces, arréate dos cogotazos y llámate cacho-carne con ojos.

    Comenzamos con los tiburones, acercándonos a ellos, que todavíamos teníamos algún minuto a esa profundidad según nuestros computadores de buceo. Después del primer minuto comenzamos a ir a aguas menos profundas. Para mí ya esa había sido la mejor inmersión de la semana con diferencia. Pasamos junto a un banco de peces de un azul muy intenso. Son grupo tras grupo de peces, grupos enormes y nosotros entre ellos y sobre los dos minutos y medio un grupo gigantesco de barracudas, pero grandísimo, las del Océano Índico son diferentes a las del Atlántico. Todo eso cuando ya estábamos yendo a superficie. Fue fabuloso. Y con las barracudas y mirando hacia el fondo terminamos esta fantástica inmersión.

  • Una segunda fiesta de Navidad

    19 de diciembre de 2023

    Por segunda vez desde que empecé con la nueva chamba, teníamos fiesta de Navidad. La del año pasado no terminó de convencerme pero como la gente se lo toma muy mal si no vas, me apunté, con traslado en guagua desde la fábrica al lugar y al volver desde allí a la estación. En lugar de currar todo el día en la fábrica opté por trabajar desde mi keli, con lo que no cargaba el portátil y además, podía ir a correr antes. Sobre las tres y media de la tarde tiré para el sur, hacia Bolduque, aunque fui a la estación de Utrecht Centraal en mi bici.

    Llegué a la oficina quince minutos antes de que saliéramos, con el tiempo justo para saludar a los colegas y provocar la úlcera del terrorista-musulmán-de-mielda. Él también iba en la guagua, pero yo iba en un grupo grande y él se sentó solo con una friki que no lo conoce. Este año cambiaron de ubicación y la fiesta era en un hotel de la zona, o en un salón de eventos que tienen en el mismo. Nos recibían con unos vinos espumosos y después teníamos que esperar hasta que acabaran los discursos, que fueron muchísimos. Tras estos, se supone que comenzaba la comida. En la invitación decían que había cocina en vivo, pero está claro que fue una exageración de la que lo organizó todo porque era un bufet con los clásicos neerlandeses, ensaladas en las que predomina la papa, platos cocinados con mucho pollo, algo de pescado, arroz y fideos y en un rincón, apartado y como oculto, un jamón italiano, al que marcaron como a un judío con un montón de carteles avisando que no era Halal. Da vergüenza que en nuestra tierra tengamos que ser tan corteses con los moros. El ochenta por ciento de la gente no era musulmana, les podrían haber puesto a ellos una mielda de mesa con sus carnes y el resto para los demás, que los moros no se cortaron un pelo a la hora de beber como cosacos y que yo recuerde, esa es otra cosa que tienen prohibida y además, es que vi a más de uno acercarse a la mesa de los jamones, aunque uno salió por patas cuando otro colega le señaló el cartel y aquel ya no se podía hacer el tonto, que era su estrategia.

    Yo soy muy flexible y como conozco a casi todo el mundo, para comer me senté en una mesa con gente con la que normalmente no trato. Tras la comida, la gente seguía bebiendo a saco y en el escenario había un pinchadiscos acompañado de un saxofonista. Dos horas después del inicio, la gente ya empezaba a emborracharse y empezaron a bailar, o a ejecutar movimientos espasmódicos que supuestamente son de baile. El joputa-terrorista-musulmán-de-mielda estaba más borracho que ninguno, que al parecer si hay alcohol gratis no le preocupan para nada sus niños palestinos y no ve la sangre en nuestras manos y hacía el payaso en la pista de baile. En el tiempo que llevo en la empresa ha ganado fácilmente veinte kilos de tripa y va camino de ser mórbido para el año que viene, con lo que si hay un buen Dios en el cielo y visto que ese no va ni a jiñar sin coger el coche, lo reventará con un buen paro cardíaco y yo sé de un Elegido que lo celebrará durante al menos una semana. En las dos horas siguientes aquello se degradó muchísimo y algunos hasta se quitaban las camisas bailando, las tías, que ya de entrada tenían pintas de arretranco, tras horas de sudor, tenían pintas de mamarrachas y a más de una le salió la Orca que ocultan con maquillaje y vamos, si te las topas de frente en un callejón oscuro, huyes gritando.

    Cuando acababa la fiesta, los que nos íbamos en la guagua fuimos a la susodicha y me aseguré que uno de mis colegas, que estaba borracho pero que de verdad, no se perdiera. Iba sentado a mi lado y cuando llegamos a la estación él tenía dos minutos para tomar su tren y me dice que lo perdía porque no quería correr solo. Le pegué un empujón y me puse a correr y entonces ya él también lo hizo, y otros dos que iban en el mismo tren, que cuando están tan borrachos al parecer se les activa el modo borrego y solo pueden seguir a otros. Los guié hasta su tren, que no era el mío, y llegaron a tiempo para subirse y supongo que conseguirían bajarse en su parada, aunque no me quedaba claro.

    Mi tren salía cinco minutos más tarde y una vez en Utrecht Centraal pillé mi bici y volví a mi keli. Mi jefe no apareció por la cena, por segundo año, con una excusa de unas reuniones que se alargaron mucho. El año que viene como que yo paso de ir, que yo no tomo alcohol, la comida para mí deja mucho que desear y prefiero mil y una veces ir al cine a pasar ese trago.

←Página anterior
1 … 163 164 165 166 167 … 3.624
Página siguiente→
  • huitten en Sin duda algunaEs una pena. Ya me imaginaba que, con el…
  • huitten en Día 8 – Thulhaagiri – Okkobe Thila 2Ahora lo entiendo. Una lección más en mi…
  • sulaco en Sin duda algunaIntenté comentar libros pero paso, prime…
  • sulaco en Día 8 – Thulhaagiri – Okkobe Thila 2Según aumenta la profundidad, los colore…
  • Genin en La vida de Chuck – The Life of Chuck¡Estupendo! Salud
  • Genin en La boda de mi mejor amigo – My Best Friend’s WeddingSi, es una peli simpática… Salud
  • huitten en La vida de Chuck – The Life of ChuckHay que verla sí o sí.
  • huitten en La boda de mi mejor amigo – My Best Friend’s WeddingEsas son las que divierten y te hacen di…

Únete a otros 16 suscriptores
Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
  • YO NUNCA – Fui ninguneado
    12/06/2023
  • YO NUNCA – Jiñé a oscuras
    22/05/2023
  • YO NUNCA – Hablé meando
    01/05/2023
  • YO NUNCA – Viví la transición
    10/04/2023
  • YO NUNCA – Conté un secreto de algún colega
    20/03/2023
This website uses cookies
Esta página web usa cookies para recordar tu nombre si comentas. Asumimos que no te importa pero si te molesta, puedes elegir quedar fuera.Aceptar Rechazar Leer más
Privacy & Cookies Policy

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR