Distorsiones

Mira que me están poniendo peli tras peli de terror en el cine porque saben que no me pierdo una y no gano para disgustos. Por suerte las he podido ver en horas naturales, aunque para hacerlo he tenido que hacer malabarismos con el trabajo desde casa para poder terminar a tiempo de salir por patas para el cine a ver las pelis. Está clarísimo que la falta de ideas es como la sequía del cine, está empantanada en el cine de terror. Esta última se titula All Fun and Games y hasta donde yo sé, creo que no está previsto su estreno en España, que de hacerlo el título sería truscoluña no es nación.

Un puñado de julays poligoneros se pasan una mielda de cuchillo de rebajas de chino con todo a un leuro.

Resulta que en Salem, sí, en ese villorrio, un panoli descubre en una keli abandonada un cuchillo o algo así, con un diario que tiene cienes y cienes de milenios y resulta que el cuchillo tiene una inscripción por los dos lados y al leerla como que se meten en una especie de juego sádico con un espíritu truscolan, suciolista y podemita que posee al que lo hace y que obliga al resto de amiguitos a jugar a los juegos de siempre, pero con mucha mala baba y bueno, que eso es lo que hay.

La idea era tan escasa, es decir, que la escribieron en un papelito tan minúsculo, que la película, estirándola todo lo que pudieron, y mira que la estiraron, llega a los setenta y seis minutos y se puede confirmar y hasta confirmo que podrían haberla dejado en episodio de cuarenta minutos de una serie. Es que no tenían absolutamente nada. Sin guion, el siguiente insulto es decir que es cine de terror. Para eso tendría que dar miedo, que no lo da, es más bien lástima y pena, penita, pena por algo que está embadurnado de estupidez y de falta de originalidad. Asa Butterfield, que es un actor británico del que yo soy muy fans porque sale en la magistral serie Sex Education, aquí da pena y no pasa por gringo ni jarto de lefa de lesbiana camionera. Además, hacerlo pasar por adolescente es estirar el concepto demasiado, que el chamo tiene veintisiete tacos y los aparenta. Esto tiene no uno, sino dos directores, con lo que queda demostrado que dos kabezones vacíos dan como resultado otro kabezón vacío, que es que ni entre los dos consiguieron nada. En el tramo final como que prepararon la película para una segunda parte, pero si soy honesto, es que ya no me acuerdo como terminó, no recuerdo ni quién sobrevivió ni quién la diñó, lo cual nos da una idea del nivelazo que tenía la cosa.

Cualquier miembro del Clan de los Orcos al que se le ocurra ir a ver esto, hará bien en llevarse el mechero y la botella de gasolina. Espantará a los sub-intelectuales con GafaPasta.

Yo vivía en completa ignorancia hasta que en el preestreno sorpresa de la semana, que ahora no es semanal, sino que lo ponen y lo quitan y lo vuelven a poner cuando tienen algo para estrenar, nos empetaron esta película, de la que nadie había oído hablar o visto su trailer porque resulta que es un telelefilm para una plataforma digital y tal y tal que creo que no está en Europa, o al menos en los Países Bajos y que supongo que están buscando la manera de recuperar el pastizal que se gastan en pelis que no ve nadie. Se titula Please Don’t Destroy: The Treasure of Foggy Mountain y hasta donde yo sé, jamás se estrenará en los cines españoles, aunque con ese pedazo de título lo lógico sería que en español lo acortaran a truscoluña no es nación.

Unos julays abobancados se van al campo de excursión a buscar una escultura rancia o algo así, sin chimpún.

Tenemos tres panolis mayormente fracasados que más o menos son conscientes de su fracaso y deciden irse a las montañas a buscar un tesoro que escondió algún panoli allí porque creen que tienen una pista definitiva. Una vez en el terreno, dos guardas forestales intentarán robarles el mapa y acaban metidos en una secta o algo así, con unas movidas rarísimas.

Esto es un telelefilm como de aventuras pero que es una especie de mezcla entre cine para adolescentes con cine para adultos. Es demasiado fuerte para ponérselo a los chiquillos, pero sin embargo el tipo de humor y las boberías son más bien para cerebros poco desarrollados o muy básicos, como los de los orcos. La historia es increíble de inicio a fin. Se encuentran un mapa del tesoro, van al monte, encuentran el tesoro, unas pencas se lo roban, lo contraroban, acaban siendo capturados por una secta, y así de bobería en bobería hasta un final de auténticas polladas y aún así, entretiene y si no te lo tomas en serio, sirve para matar hora y media.

Esto es carne de sobremesa de fin de semana, ideal para miembros del Clan de los Orcos y yo hasta diría que para los sub-intelectuales con GafaPasta, que pueden negar que la han visto y decir que estaban echándose una siesta.

Vaya por Cristo rey. Yo vivía en la felicidad de la ignorancia de las pelis del plataformón digital y tal y tal de la manzana podrida y mordida porque no las ponían en el cine y como al parecer esas solo las ve Virtuditas, han decidido castigarnos a todos y poner sus costosas pelis en el cine un par de semanas y así acabo viéndoles, que no estoy seguro que sea algo bueno. Así mismamente fue como llegué a Napoleon, la cual al parecer se titula Napoleón en su versión en español, que la tilde es super-hiper-mega importante. Yo por la pinta que tiene el tío en el poster la habría titulado truscoluña no es nación, que parece un criminal prófugo recién sacado de portabultos.

Un julay con mucha mala baba está encoñao de una pava marrullera.

En un universo paralelo y visto el trailer, uno se prepara para ver una biografía de Napoleón y todos sus logros. En nuestro universo cancelado y buenista, lo que tenemos es la historia de como un tipo está encoñado de una pajarraca llamada Josefina que lo ningunea y lo putea y lo trata como la mielda y de cuando en cuando, el chamo se cansa y se va de gira pero siempre vuelve al más de lo mismo de la pava. En un punto determinado la madre del pavo decide que la penca esa no le quiere dar herederos, lo hace follar con un pendón verbenero y la empreña de una chingada y entonces lo divorcia, lo hace casarse con una hembra de sangre real y tienen un hijo, pero él sigue encoñado con la pelandusca.

Yo no sé que libros de historia tienen los gringos pero lo que cuentan en esta película y hasta lo que está en la güiquipedia son cosas muy diferentes. Esto mejor lo hubieran llamado Josefina tiene los cataplines porque es que el otro pobre sale muy mal parado, como un pusilánime y acarajotao que la sigue como perrito faldero. Lo absolutamente mejor de la película son las batallas, que es la razón por la que le doy los puntos que le doy, pero vamos, que cada vez que regresa a su keli en Francia, retorna el masque y hubo un momento en el cine en el que me dio un jamacullo y me quedé dormido por lo menos diez minutos, que es que además esto dura más de dos horas y media y le sobra al menos hora y media de Josefina. Joaquin Phoenix es un buen actor pero aquí no lo parece, sobreactúa y distrae y además, no es creíble pero que para nada. También destacar que quién quiera que escribió los diálogos debería dejar de ver culebrones venezolanos, que la gente normal no habla así y algunos de los diálogos son terribles. A Ridley Scott se le fue el baifo al cielo y ha logrado una de sus peores películas.

Cualquier miembro del Clan de los Orcos hará bien en huir del cine si la ven en cartelera. Seguramente los sub-intelectuales con GafaPasta picarán, pero saldrán del cine muy decepcionados. Es modosa tirando a aburrida.