Distorsiones

  • Inicio
    • Contactar
    • Acerca de
  • Lo imprescindible
    • Visitar Holanda
    • Índice de álbumes de fotos
    • Índice de viajes
    • Recetas de cocina
    • Hembrario
    • El club de las 500
    • Álbum de fotos de bicicletas
    • Álbum de fotos de cervezas
  • Destacados
    • La Arbonaida
    • Comida en fotos
    • Mi herencia
    • uno+cero
    • Visitar Holanda
    • Mis ratos en la cocina
  • El castillo de Bratislava desde el Slavín

    10 de febrero de 2021

    Desde el Slavín, el castillo de Bratislava se ve al mismo nivel y a la izquierda podemos ver el OVNI del puente. Toda la zona que rodea esta colina es de puro lujo Merilleín, con las kelis de los embajadores y demás. En la subida hasta el lugar posiblemente pillaron mi foto en cienes y cienes de cámaras de seguridad, que según iba para arriba pensaba más bien si allí no sería donde viven los narcotraficantes de ese país.

  • Haciendo camino en la nieve

    9 de febrero de 2021

    Cuando al comienzo de la semana pasada el instituto nacional de meteorología anunciaba que a partir del fin de semana iba a llegar un frente frío e íbamos a tener nieve todos nos partíamos la polla de risa porque esos mismos han anunciado el mismo evento dos veces antes este invierno y al final, en los días predichos, no pasaba nada. Así, visto el desinterés de todos y la falta de credibilidad, según se acercaba el día, incrementaban el dramatismo y el viernes ya decían que el sábado por la tarde comenzaría a nevar y seguiría haciéndolo durante al menos doce horas y subieron el nivel de alerta al color amarillo porque la nieve vendría acompañada de vientos fortísimos. Uno es incrédulo pero no tonto, así que me aseguré de estar aprovisionado que ya me conozco a la tropa y sé lo que sucede, que aquí todos somos superiores a las razas inferiores del sur hasta que caen cuatro milímetros de nieve y se escoña todo porque a uno se le olvidó encender los calefactores de los cambiadores de raíles, el otro canceló la compra de sal para poner en carreteras y el tercero alquiló las máquinas de poner sal a otro país porque era una pena tenerlas en las cocheras. El sábado por la mañana los del instituto ese de brujería subieron el color de la alerta a naranja y ya decían que nevaría todo el domingo y seguramente incluso por la noche y habría vientos terribles y la sensación térmica sería monstruosa y de nuevo, como que se les veía un poquito melodramáticos con tanto confinamiento, que parece que se están poniendo melosos como la fruta confinada. Por la tarde, ya tiraron la keli por la ventana y cambiaron el color de la alerta al rojo, el máximo y directamente decían que la gente se quedara en sus kelis, que nadie saliera para no morir y que nos íbamos a tomar por culo en cuesta abajo y sin frenos. Después comenzó a nevar, sobre las siete de la tarde y era una preciosidad, una nieve muy suave, que caía de noche y que no molestaba, sin el dramatismo que le anticipaban. El domingo por la mañana, el país amaneció con el verde habitual cambiado por el blanco y seguía nevando y ahí sí que había viento, un viento que empujaba la nieve de un lado a otro, la movía y que cuando te daba de frente, hacía que la sensación de temperatura bajara un montón de grados, ya que no es lo mismo cuatro grados bajo cero sin viento que con ventolera, que te los hace sentir como si fueran doce. Por supuesto que salí a la calle, como todo el mundo, para pasear y ahí pude comprobar que las autopistas se detuvieron porque se les olvidó echar sal y limpiar la nieve, leí que los trenes jamás llegaron a circular ese domingo porque les daban miedo los diez centímetros de nieve que teníamos y por supuesto, las agujas para cambiar de vía se congelaron, los autobuses también se quedaron en sus cocheras y regresamos al concepto de poblacho, en el que el mundo es solo aquello que tienes en un radio de un kilómetro a tu alrededor. Como no paraba de nevar, no se podía hacer nada y dejamos estar la nieve e hicimos fotos, muchísimas fotos. En mi paseo ya tenía claro que al día siguiente, el lunes, no podría ir a correr porque una cosa es ir por un caminito y otra muy distinta correr por la nieve o el hielo. El lunes por la mañana, se detuvo la nieve.

    La cantidad total de nieve, se puede ver en la foto anterior, no fue demasiada, aunque suficiente para doblegar el sistema ferroviario holandés durante cuarenta y ocho horas y transformar las autopistas en carreteras con un solo carril abierto y todos en fila porque los otros carriles estaban helados. La foto anterior la hice antes de ponerme a hacer un caminito para poder transitar por el jardín de mi keli, que si los gurús de la meteorología y quiromancia tienen razón, íbamos a estar bajo cero al menos una semana. Saqué mi pala, me puse al tajo y después de un rato, la cosa pintaba de otra manera:

    Puede parecer una chapuza del copón, pero después de hacer la foto, saqué el cubo con cinco kilos de sal para nieve que tenía comprado desde dos años antes y básicamente, gasté cuatro kilos en el sendero que acababa de hacer. Mi vecino limpió también su caminito, pero le puso un pelín de sal, un par de puñaditos porque yo creo que quiere llegar a los ochenta años con esos cinco kilos de sal. El resultado, del que no tenemos foto, es más visible hoy. En mi jardín, hay un sendero claramente delimitado y en el que no hay hielo y por el que se puede ir con seguridad. En su caso, esta mañana lo vi echando sal a destajo después de la bronca que le echó su mujer porque ahora tienen que caminar no por el camino, sino por fuera del mismo, porque aquello es una trampa mortal de hielo. Durante la noche llegamos a estar por debajo de los doce grados bajo cero y en algunos lugares incluso más en negativo y en algunos zoológicos tuvieron que meter a los pingüinos en refugios porque al parecer, las razas que muestran no aguantan una temperatura tan baja. Los ayuntamientos, el sábado, cerraron muchos canales al tráfico de barcos y con las esclusas que tienen casi todos para evitar el movimiento de agua. El objetivo, la creación de hielo, ya que en un país con toque de queda y sin tiendas, bares o restaurantes abiertos y sin ninguna posibilidad de ocio, lo de tener canales helados para patinar sobre hielo es como una bendición y aquí ya todos son expertos que miden el grosor del hielo y lo miman para que siga creciendo y es lo más normal del mundo el cruzarte con un chamo que está cerca de un canal y que lleva en la mano un taladro de esos con batería y el chamo no es un asesino en serie o el malo de una película de terror, simplemente, está haciendo agujeros en el hielo para poder medir el grosor. Yo por si acaso, ya he quedado para ir a patinar el viernes por la tarde y hacer una rutilla de veinte o treinta kilómetros, que es algo para lo que me preparé durante toda mi juventud yendo a patinar con los colegas en las Palmas. El resto de los días, iré a los canales aquí en Utrecht que tenemos lugares preciosos para patinar en el interior de la ciudad.

  • El Slavín

    9 de febrero de 2021

    Visto de cerca el Slavín echa un tufo a mausoleo comunista que no veas. El obelisco sobre el edificio alcanza casi los cuarenta metros de altura y en el lugar hay seis tumbas colectivas y doscientas y pico individuales con lo que la población rusa del monumento es de cerca de siete mil soldados. En el interior del salón hay un enorme sarcófago de mármol blanco, pero creo que en ese no metieron a nadie por aquello de que la gente lo venga a adorar. Lo mejor del lugar son las vistas de la ciudad, que veremos en la próxima foto.

  • Sobre Brujas y Rotterdam

    8 de febrero de 2021

    Llegamos a la traca final, la conclusión (por ahora) de una serie gigantesca de vídeos con despegues y aterrizajes porque a mí no me queda nada claro que poniendo cuatro vacunas aquí y seis allí se vaya a arreglar el problemote que tenemos y como nadie se preocupó en hacer fábricas para producir vacunas por trillones, para cuando todos estemos vacunados ya habrá sesenta y ocho variedades más peligrosas y contra las que nuestras vacunas no podrán luchar y volverá a empezar todo. Quizás este sea el fin de la especia, siempre fuimos muy románticos viendo un asteroide que nos destruía o una raza de extraterrestre o un ataque nuclear truscolano y de los kabezudos koreanos de mielda y resultó que un puto virus por una sopa de murciélago mal cocinada fue lo que nos doblegó. Bueno, en este final de los vídeos de aviones tendremos tres vídeos independientes pero relacionados y la razón es que no pienso acelerar ni recortar un solo segundo de los doce minutos que tengo grabados y vienen saliendo a cuatro minutos por vídeo, quizás un poco menos o un poco más. Este primer vídeo, además, contiene en realidad un pequeño segmento que grabé antes de comenzar el aterrizaje, cuando estábamos empezando a descender. Está al comienzo y esa ciudad que vemos en la noche al comienzo, es la ciudad belga de Brujas, con su puerto, que lo tiene y está separado de la ciudad. Después habrá una cortina mágica y la secuencia continua comienza llegando al puerto de Rotterdam, gigantesco e iluminado por la noche para que los narcotraficantes y demás delincuentes puedan hacer mejor su trabajo. El vídeo terminará cuando dejamos Rotterdam atrás (o la parte que vemos, que es la más pegada al mar) y seguimos yendo en dirección al aeropuerto de Schiphol. La música en este caso es la canción Believer de Imagine Dragons, que es como que muy melodramática y pachanguera.

←Página anterior
1 … 653 654 655 656 657 … 3.616
Página siguiente→
  • Genin en Primer día de buceo en RasdhooLeer estas entradas tuyas, confieso sin …
  • Genin en Buceo en el atolón de Malé y viaje a RasdhooFelicitaciones por el restaurant… 🙂 S…
  • Genin en Tratando de dormir en los avionesA ver si hay algún video… 🙂 Salud
  • Genin en Thunderbolts*Pasando de todas las de su clase… 🙂 S…
  • Genin en Liberen a Willy – Free WillyComo si no tuviera ya bastantes sardinas…
  • Genin en Until Dawn: Noche de terror – Until DawnPasando… Salud
  • Genin en El contador 2 – The Accountant 2La primera, aquí, la titularon «El Conta…
  • Genín en Día 7 – Lankan Finolhu – Manta Point 4No, yo nunca duermo siesta… 🙂 Salud

Únete a otros 15 suscriptores
Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
  • YO NUNCA – Fui ninguneado
    12/06/2023
  • YO NUNCA – Jiñé a oscuras
    22/05/2023
  • YO NUNCA – Hablé meando
    01/05/2023
  • YO NUNCA – Viví la transición
    10/04/2023
  • YO NUNCA – Conté un secreto de algún colega
    20/03/2023
This website uses cookies
Esta página web usa cookies para recordar tu nombre si comentas. Asumimos que no te importa pero si te molesta, puedes elegir quedar fuera.Aceptar Rechazar Leer más
Privacy & Cookies Policy

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR