Distorsiones

Seguimos con películas relacionadas con Tim Burton y esta semana le llegó el turno a una que en realidad, él no dirigió, que él escribió el guion y todo el mundo la considera una película suya, pero no, está dirigida por otro julay y es de animación de fotograma a fotograma y en este caso, también podemos hablar de un musical. Se trata de The Nightmare Before Christmas y en España se conoce como Pesadilla antes de Navidad, aunque mi cerebro siempre ha leído eso como PesCadilla antes de Navidad, supongo que porque en realidad lo que pienso es truscoluña no es nación.

Un julay jinameño es un pinche delincuente y se encoña de una pava barriobajera como él.

Tenemos que el rey de Halloween y de la ciudad de Halloween descubre la ciudad de la Navidad y por puro aburrimiento decide que ese año ellos van a hacer lo de la Navidad también, solo que la miasma que él subcontrata para sus trapicheos no termina de captar el concepto y las Navidades organizadas por este pavo serán un puto fracaso del copón. Entremedias, como que se enamora de una especie de hembra creada por un científico loco o algo así.

Viendo esta película aluciné porque salvo por una escena, no recordaba absolutamente nada de la historia, aunque estaba y estoy convencido que la había visto en algún pasado lejano, pero la música la identifico plenamente y hasta la letra de las canciones me sonaba muy familiar, que yo de siempre he sido muy fans de Danny Elfman y en esta película, además de componer, es la voz del protagonista. La animación fotograma a fotograma es fabulosa y se sigue viendo espectacular, sobre todo ahora que tenemos proyectores decentes en los cines, la calidad de la imagen es épica. La historia es entretenida, aunque para mí se podían haber ahorrado alguna cancioncilla, pero disfrutas la peli igual y total, no son más de ochenta minutos. No reconocí las voces de ninguno de los protagonistas, lo cual hoy en día es raro, que yo veo las pelis animadas y en seguida sé quién es el actor o la actriz detrás de la misma. La película es un poco gore y definitivamente, los niños de hoy en día, a base de mimarlos y malcriarlos, si la ven les puede dar un jamacullo. Una lástima que no le dan prácticamente nada de tiempo al romance, desde el principio sabemos que la pava está encoñada hasta las trancas con el pavo, pero tenemos que esperar al final para que él se dé cuenta y como que pasamos por la escena muy rápidamente. Pese a eso, sigue siendo una historia fantástica y una película que da gusto volver a ver.

Si eres un miembro del Clan de los Orcos, tu única neurona no puede procesar algo así. Esto es obligatorio para todos y cada uno de los sub-intelectuales con GafaPasta.

Este es el tipo de documental que más le mola al Ancestral, los de buceo, que son obviamente los mejores. Este documental lo dirige un neerlandés que ha hecho un montón de pelis de este tipo que con los años he ido comentando por aquí y puedo confirmar y confirmo que no siempre me han gustado y algunas las he destrozado. Esta última, metiéndose en el mar, ya tenía por lo menos dos puntos mínimos antes de empezar. El cine estaba petadísimo el domingo cuando la fui a ver, lo cual me sorprendió, pero vamos, es que hay tanta mielda en la cartelera que ya la gente está desesperada por encontrar algo bueno. La película se titula De wilde Noordzee y en España jamás se estrenará, ni como El salvaje mar del Norte ni como truscoluña no es nación.

Un julay está obsesionado con los bichos acuáticos.

Resulta que un panoli neerlandés se fue de vacaciones a Asia o el Caribe, se hizo un curso de buceo por correspondencia y ya se obsesionó con el tema, se compró cámaras y tal y tal y acabó como profesional del tema y finalmente, un director lo contacta para hacer una peli del asunto en la que él es el protagonista.

Tenemos el mar del Norte, entre los Países Bajos, el Reino Unido, Alemania, Suecia, Noruega y Dinamarca y es uno en el que mayormente la gente no bucea porque ese agua es fría que no veas y es un mar muy turbio. El pavo del cámara decide hacer una peli en este barrio y descubrirnos las maravillas del susodicho, no solo bajo el agua, también de pájaros que viven en la zona e iremos por diferentes zonas del mar del Norte encontrando animales increíbles y también descubriremos que en algunas zonas, la prohibición de pescar está trayendo de vuelta animales que se habían extinguido en la zona, como el atún azul, que ha vuelto cerca de Suecia ahora que no los matan. La historia la une el cámara, que también pone la voz en off y durante la hora y media que dura aprenderemos un montón de los animales que frecuentan esta parte del Atlántico, que al final, se mire como se mire, esto es parte del Océano Atlántico. La imagen del póster es con un tiburón peregrino, en una escena increíble y yo dudo muchísimo que llegue a ver uno de esos en mi vida porque son más bien de mares fríos y yo soy de mares cálidos.

Ya al decir la palabra documental salen huyendo aterrorizados todos los miembros del Clan de los Orcos, pero vamos, cualquier sub-intelectual con GafaPasta que se precie seguro que la verá para fardar con sus amistades.

Esto que voy a comentar lo han promocionado un poco en el cine en los Países Bajos y la verdad, que la única vez que presté atención al trailer, no me pareció gran cosa, pero bueno, todos sabemos que al final, ir al cine es para mí más importante que lo que puedan estar dando, así que decidí arriesgarme. La imagen paradisíaca que se ve en el póster no es auténtica, esa es una escena en la peli que dura menos de medio minuto, el resto es en una keli o en ciudad. La película se titula The Fabulous Four y es prácticamente imposible que se estrene en España y mira que han propuesto truscoluña no es nación como el título para engañar al populacho y que acuda en manadas al cine.

Unas julays operadísimas se van de parranda a Miami, pero sin chimpún.

Tenemos cuatro viejas insoportables que se conocieron en la universidad y han seguido manteniendo el trato. Una ahora es viuda y se muda a Miami y allí se encoña de un pavo y se quiere casar con él en seguida y las otras acudirán para despedir sus seis meses de viudedad y soltería o algo así. Allí irán del tingo al tango haciendo polladas pero sin cipotes.

Esto es un telelefilm pero de los malos y de los que jamás ponen fuera del horario de sobremesa del fin de semana porque tienes que estar con una digestión lenta o quizás lentísima para sobrevivir a algo así. Da pena que Susan Sarandon, Bette Midler, Megan Mullally y Sheryl Lee Ralph, todas superconocidas y viejísimas, hayan terminado haciendo esto para ganar unos leuros con los que pagarse los pañales de viejas. Las pobres dan lástima, la historia es estúpida, los diálogos son criminales y como todos saben que esto es un pallufo, a al menos tres de ellas las ponen a cantar porque es algo que hacen bien, así que cada diez o quince minutos se arrancan con una canción. No había guion y vamos, que la imagen que dan de los Cayos de Florida es para huir despavorido, tremenda mielda de lugar. La directora mejor admite que es sorda y ciega y no se enteraba de nada, porque si eso no es cierto, tenía que estar hasta la pipa del coño de farlopa de la peor para no darse cuenta que esto es una cagada.

Esto unirá a los miembros del Clan de los Orcos y a los sub-intelectuales con GafaPasta en la destrucción del cine en el que la pongan. Un fracaso sin paliativos y una mancha en la flmografía de todas las actrices que participaron.