Rickshaw en Mandalay


La beba Ascanio de Mandalay sale por la mañana y se va al mercado de la ciudad a hacer la compra. Cuando acaba, tiene un montón de cosas y no están las cosas como para un taxi o mejor, es que no hay taxis salvo para los turistas. Por suerte hay una infinidad de rickshaw y por muy poco dinero, uno la lleva a casa con toda su carga. Los rickshaw birmanos son como las motos con sidecar, llevan la bicicleta y el asiento para el pasajero soldado a la bici por el lateral. Las bicicletas parecían venir de China y por supuesto, habían sido reparadas hasta el infinito y más allá. La carretera, como se puede ver en la imagen, era de esas con el asfalto de la mayor de las calidades. Para aquellos que prestan atención, el coche naranja que se ve por detrás son unos pequeños taxis de la marca Mazda usados mayormente por los turistas. Yo tuve uno de esos contratado para todos los días que estuve en Mandalay y el hombre me llevaba a todos lados con el cochillo, el cual tenía un motorcillo de risa. Según me contó, como no se permitía importar vehículos y la prohibición llevaba años, los mantenían con vida desde siempre.


Una respuesta a “Rickshaw en Mandalay”

  1. Me recuerda de como se las ingenian los cubanos para reparar sus coches sin piezas originales de repuesto…
    Salud